PEÑARANDA | El acto, como ya es tradición, servia para la entrega de varas a los nuevos mayordomos
Coincidiendo con la festividad de la exaltación de la Cruz, la ermita de San Luis se ha engalanado un año más, quedándose pequeña durante la celebración de la eucaristía con la que se iniciaba su fiesta anual. Decenas de vecinos y devotos abarrotaron el templo para, posteriormente, recorrer las calles de Peñaranda acompañando a la venerada imagen. La celebración fue también la de su mayordomía, que aprovechaba el acto, como ya es habitual, para hacer entrega de las varas a los nuevos encargados del cabildo.
La procesión daba paso al tradicional aperitivo en el que los ya nuevos mayordomos, Aitor y Nerea Hernández García, tomaron especial protagonismo. Un ágape, en el que participaron miembros de la cofradía de la Vera Cruz y numerosos familiares y vecinos, puso fin a las celebraciones.