Ahora lo entiendo

La polémica local de estos días ha sido la colocación de una pancarta en el balcón de las dependencias municipales que ocupa el grupo municipal de "Ganemos Salamanca". Esta pancarta, colocada con motivo de un nuevo asesinato machista de una mujer a manos de su pareja o expareja (uno de los muchos que siguen asesinando a toda la sociedad), decía exactamente lo siguiente: "Ni una mas. Fin de la violencia machista"; a ello se añadía el logotipo de la agrupación "Ganemos Salamanca".

Como muchas de las personas que compartimos la convicción de que aún queda mucho camino por andar para conseguir la igualdad real entre hombres y mujeres, me sentí representado por esta pancarta, por su contenido y por la oportunidad de su colocación en el Ayuntamiento que representa a todas y todos. Por ello me produjo un cierto estupor conocer que la iniciativa había sido criticada por la asociación "Ciudadanos por la defensa del patrimonio" y por la asociación "Plaza Mayor", y lógicamente he prestado atención a sus argumentos.

No se trata en ninguno de los dos casos de críticas frívolas, sino que cuentas con sólidos argumentos. Así, "Ciudadanos por el patrimonio" manifiesta lo siguiente: "Para que no haya lugar a ninguna duda: en la Plaza Mayor no tiene que haber ninguna pancarta. El tamaño, el tiempo, el lugar o el mensaje tampoco son excusa".

Me parece un planteamiento coherente y claro; ahora lo entiendo.

Lo que no entiendo es la razón por la que esta misma asociación no ha publicado un comunicado similar denunciando la exhibición de pancartas y símbolos religiosos que se hacen todas las Semanas Santas en la Plaza Mayor (quizás sea porque consideran que más importante que una mujer maltratada es una iglesia que hunde sus raíces en las "enseñanzas" de un personaje como San Pablo que afirmaba que los tres derechos de la mujer son obedecer, servir y callar); tampoco entiendo que no haya publicado un comunicado denunciando que en estos días está colocada en la Plaza Mayor una figura de un toro para celebrar la macabra feria taurina (será que más importante que una mujer maltratada es el mantenimiento de bárbaras tradiciones), o contra la colocación de carteles de propaganda de alcohol aprovechando conciertos patrocinados por empresas del sector (seguro que mucho más importante que una mujer maltratada es la exaltación del consumo masivo de bebidas alcohólicas, cuya relación con el maltrato está más que acreditada), o contra la última moda de permitir televisiones a todo volumen en las terrazas para que nadie se pierda los partidos de fútbol (mucho más importante también que una mujer maltratada o asesinada). Comprendo el planteamiento de esta asociación, no deben ponerse pancartas en la Plaza Mayor, pero no entiendo por qué solo se dice esto cuando la pancarta es un grito contra la violencia de género; será que esto no es importante y todo lo demás sí, ahora lo entiendo.

También entiendo que la asociación Plaza Mayor diga que en materia de violencia de género solo debe actuarse por consenso y unanimidad y no debe utilizarse con fines partidistas. Pero lo que no entiendo entonces es a qué fines partidistas se refiere, porque las concejalas y concejales de Ganemos Salamanca llevan años luchando contra la violencia de género, y no parece que la pancarta busque un rédito electoral cuando no va a haber elecciones municipales hasta dentro de cuatro años; tampoco entiendo que les parezca mal que se aparezca en la pancarta el logotipo de quien la ha colocado, lo normal es que cada cuál firme sus comunicaciones y sus pancartas, para que todos sepamos quienes son. Quizás el problema sea que más importante que la protesta contra un asesinato machista sea quien ha tenido la iniciativa, o quien no la ha tenido y por eso no le ha gustado; ahora lo entiendo.