El pasado año, los alumnos de tercero, con ocho años, fueron los primeros en someterse a esta prueba
A poco más de dos semanas para el inicio del curso en Educación Primaria, el director general de Política Educativa de la Junta de Castilla y León, Fernando Sanchez-Pascuala, ha confirmado, tal y como publica El Norte de Castilla, que el año que viene se aplicará la evaluación individualizada de sexto de Primaria. Esto quiere decir que los niños de doce años tendrán que realizar obligatoriamente las denominadas reválidas para demostrar que han adquirido los conocimientos exigidos durante los ciclos de Educación Primaria.
El pasado año, los alumnos de tercero ?con ocho años?, fueron los primeros en someterse a esta prueba como consecuencia de la primera parte de la implantación de la Lomce. La decisión del Gobierno fue aplicar la ley en dos partes. La primera, el año pasado, con efectos en tercero y quinto de Primaria, y la segunda, en cuarto y sexto. De ahí que el año que viene sea el primero en el que los alumnos de sexto se sometan a esta prueba.
El título de Secundaria
A pesar de las críticas, Sanchez-Pascuala defiende la importancia de este examen individualizado, puesto que, según él, la Administración pública educativa aportará recursos para que los niños que muestren más dificultades puedan obtener el título de Secundaria. El director general señaló, en declaraciones recogidas por Europa Press, que Castilla y León apenas notará la diferencia entre los criterios de evaluación de cursos pasados y los fijados por la Lomce porque en la comunidad se han aplicado requisitos similares y «muy exigentes» desde hace años. Por ello, el director general reiteró que los criterios de la nueva ley no tendrán repercusión en Castilla y León. Sánchez-Pascuala puso como ejemplo que en esta comunidad no se permite desde hace años que un alumno promocione si suspende a la vez matemáticas y lengua.
Esto, según el director general, no sucedía en otras comunidades, donde se limitaban a aplicar la normativa «pura y dura», con el consiguiente «pequeño desastre» que generaba. El popular también aclaró que la Lomce afectará «menos a las estructuras de primaria, secundaria y bachillerato y más a los aspectos organizativos internos». En este sentido, Sánchez-Pascuala justificó la evaluación individualizada que se aplicó a 20.000 alumnos de tercero de primaria el pasado año porque permitió «conocer que el 6% de alumnado no tenía los niveles de competencia adecuados». Esto, según el director general, posibilitó que los niños con más dificultades pasaran automáticamente a seguir un plan de mejora en cuarto de primaria para evitar que «circulen por la educación primaria con contenidos que no dominan y que fracasen».