Sin embargo, los PGE no recogen ninguna partida específica para los más de 300.000 beneficiarios
Las personas con un Grado I de Dependencia ?aquellas que necesitan ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, al menos una vez al día o tienen necesidades de apoyo intermitente o limitado para alcanzar su autonomía personal? también tienen derecho desde el 1 de julio a la ayuda a domicilio o a la teleasistencia.
Según la ley, el ingreso de los dependientes de Grado I ?unas 314.000 personas en España? estaba previsto inicialmente para 2012, pero las medidas de austeridad que se tomaron motivaron este retraso de más de tres años en la inclusión de estos dependientes en el Sistema de Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD). Ahora, desde el 1 de julio, su situación ha cambiado: las ayudas previstas para ellos pueden ser por ejemplo, ayudas en el domicilio o teleasistencia, informa OCU.
Sin embargo, en los presupuestos generales del Estado para 2015 no existe una partida específica que contemple la incorporación de los nuevos beneficiarios del SAAD. Desde el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad aseguran que "se va a transferir a las comunidades autónomas las cantidades que correspondan al igual que hace con el resto de los beneficiarios con prestación reconocida y que ya gozan de la misma". Las administraciones autonómicas tienen ahora seis meses para enviar los nuevos listados al IMSERSO.
Teniendo en cuenta la difícil situación por la que pasan los dependientes y sus familias, "desde OCU vemos con preocupación que no se tenga asignada aún la financiación adecuada". La familia sigue siendo el principal apoyo de los dependientes. De hecho, 7 de cada 10 encuestados vive con familiares. Y la familia se ocupa de ellos, hasta el punto de que el 21% de los familiares dejan su trabajo o reducen su jornada para cuidar al enfermo. También es habitual que los familiares se muden a casa del dependiente u opten por acogerlo en su vivienda.
Según datos de la Junta de Castilla y León, en Salamanca, el 99,1 % de las personas que tienen derecho a una ayuda por dependencia recibía a 31 de diciembre del pasado año la prestación que le correspondía. A lo largo de la legislatura, se ha reducido el número de personas que esperaba para recibir su prestación en 14 puntos, pasando del 14,83 % al 0,9 % a finales del pasado año (83 personas). De esta forma, 9.114 personas -3.517 con domicilio en la capital y 5.597 en la provincia- reciben un total de 11.102 prestaciones por dependiente con grado III o Grado II. A partir de ahora, cumpliendo la Ley, también los dependientes de Grado I tienen derecho a percibir la ayuda.