En Castilla y León se siembran 25.464 hectáreas, 893 menos que el pasado año
Los datos ofrecidos por la Consejería de Agricultura y Ganadería sobre el cultivo de la remolacha con la información ofrecida por las solicitudes de la PAC de 2015, muestran como esta campaña se han dedicado a esta raíz 25.464 hectáreas en Castilla y León, lo que suponen 893 hectáreas menos que en el año 2014. Curiosamente, solo en dos provincias, Salamanca y Segovia, aumenta el cultivo en 36 (un 2,1% más) y 37 hectáreas respectivamente, con 1.754 y 1.400 sembradas. En el resto, a destacar la caída del 28,4% de Soria o el 6,4% que se reduce la superficie en León.
Lo que aparentemente podría ser un dato malo, que continuaría con la tendencia de descenso vivida desde 2006, cuando se aprobó la reforma de la Organización Común del Mercado del Azúcar (OCM) en Bruselas, no lo es tanto, sobre todo, si te tiene en cuenta que buena parte de esas hectáreas se corresponden a la reducción de la contratación y por tanto de siembra llevada a cabo con la Cooperativa ACOR para "cubrir" el excedente de producción que se recogió en la molturadora de Olmedo en la campaña anterior.
Sin embargo, si que parece interesante destacar que la reducción más importante, por lo que se refiere a las distintas provincias, se produce en León con una bajada de 384 hectáreas que significa un 6,4% de las sembradas en la campaña 2014 cuando se alcanzaron las 6.037 has.
Dándose las circunstancia que la situación vivida por los socios de ACOR, de esa reducción obligada de siembras, tiene una menor incidencia en la provincia leonesa pues la cooperativa cuenta allí con una menor implantación. Habrá que buscar otros motivos para ese significativo descenso en la zona en la que se concentran buen parte de las esperanzas de futuro de la remolacha de Castilla y León aprovechando el menor coste de los riegos, quizás vinculado a los cumplimientos del greening o a la opción hacía otros cultivos de regadío como las judías que, según afirmaba recientemente la Lonja de León, había disparado su superficie.
Según Azucarera y ACOR el cultivo se presenta en buenas condiciones, con unas siembras en fechas oportunas, aunque los calores de los últimos días pueden tener su incidencia aunque sólo sea por el incremento de los costes de riego al necesitar la planta un mayor aporte de agua.