'Victoria en el siglo de las luces', con la dirección de Bernardo García-Bernalt (GALERÍA DE FOTOS)
'Victoria en el siglo de las luces' ha sido el título del concierto en honor al V centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús celebrado hoy en el Colegio Fonseca.
La Oficina del VIII Centenario, en colaboración con el Servicio de Actividades Culturales y la Academia de Música Antigua de la USAL, han organizado este concierto interpretado por el Coro de Cámara de la Universidad de Salamanca, con Bernardo García-Bernalt en la dirección, Sara Ruiz al violone y Carlos García-Bernalt al órgano. Además, esta actuación musical ha supuesto la recuperación en tiempos modernos de la disposición de Llorente y Sola de los magistrales responsorios de tinieblas de Victoria.
El manuscrito fue descubierto y rescatado por Alfonso de Vicente, reputado especialista en Tomás Luis de Victoria, quien presentó un análisis del mismo en la "Medieval and Renaissance International Conference", organizada por el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en julio de 2011. La propuesta del programa recupera la colección fechada en 1789 y titulada "Los Responsorios de los segundos y terceros nocturnos de los Maytines del Miércoles, Juebes y Viernes Santo dispuestos metódicamente por Don Diego Llorente y Sola [?] sobre los que compuso Don Thomás Luis de Victoria", conservada en la Catedral de Huesca, donde Llorente y Sola fue maestro de capilla antes de trasladarse a Salamanca para ocupar el puesto de organista de la catedral, donde estaría apenas tres años hasta su muerte en 1802.
El Officium tenebrarum se celebraba de madrugada y a medida que avanzaba se iba haciendo de día. Por este motivo, se colocaba un candelabro triangular con quince velas conocido como tenebrario, de tal manera que cada vez que concluía el canto de un salmo se apagaba una. Para facilitar la asistencia de los fieles en numerosos lugares, se trasladó este oficio a la tarde del día anterior, por lo que el progreso de la luz natural en la celebración se produce justo el contrario que en el oficio original, con lo que la extinción de las llamas del tenebrario, no hace sino acentuar la oscuridad. De este modo, el rito de apagar las velas simboliza la extinción de la luz de la vida y el paulatino abandono de Jesús por parte de sus discípulos, además de producir un efecto plástico que sin duda, aumentaba el patetismo de la celebración.
El Coro de Cámara de la Universidad de Salamanca fue fundado en 1984 por miembros del Coro Universitario, con el objeto de especializarse en la polifonía ibérica de los siglos XV al XVIII. Desde entonces viene realizando un intenso trabajo de difusión y estudio de este repertorio, que se ha plasmado en centenares de conciertos, muchos de los cuales han supuesto el "reestreno" de partituras inéditas correspondientes a este periodo.
Fotos: Pablo de la Peña