En el toro con el que arrancó la corrida, Javier Castaño dejó detalles sin transmisión por la sosería del animal
A hombros salió Alberto Lamelas esta tarde de la plaza de toros francesa de Aignan tras sellar una gran actuación en sus toros. Ofreció ese nivel con el que sorprendió a Madrid hace tres temporadas, logrando el cariño del público galo ante la corrida de Concha y Sierra que, por otro lado, no fue del todo lucida. Una oreja cortó a cada toro de su lote el jiennense. El tercero fue un toro flojo pero Lamelas dibujó una faena correcta. Tenía el astado francés la cabeza un punto violenta en su movimiento, matando Lamelas al primer intento y cortando una oreja.
En el toro con el que arrancó la corrida, Javier Castaño dejó detalles sin transmisión por la sosería del animal. Mató al primer intento antes de saludar desde el tercio. En cuarto lugar, Javier Castaño sorteó un buen toro, que remató al caballo hasta en tres ocasiones desde el centro del ruedo. No aprovechó su embestida Javier Castaño, al que pudo torear con más ánimo, siendo silenciado.
Silencio escuchó el gaditano Pérez Mota con el también soso segundo, que además era flojo. No transmitió en su muleta y fue casi imposible en la zurda, terminando faena en las tablas. Silencio.No pudo lucirse tampoco con el deslucido cierraplaza.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Aignan. Corrida de Resurrección.
Toros de Concha y Sierra,bien presentados pero bajos de juego.
Javier Castaño, ovación y silencio.
Pérez Mota, silencio y silencio.
Alberto Lamelas, oreja y oreja.
FOTO: FEDERACION TAURINA VALLADOLID