Crece el número de fieles asistentes al besapiés del Cristo del Silencio

La Hermandad del Santísimo Cristo de la Expiración de Ciudad Rodrigo, conocida también como Cofradía del Silencio, dio arranque en la tarde del Miércoles Santo a los actos que lleva a cabo cada año dentro de los días de la Semana Santa.

La primera cita para los cofrades de la Hermandad fue una misa en la Iglesia de San Pedro-San Isidoro en memoria de los cofrades difuntos, que fue presidida por el capellán de la Hermandad, Ángel Martín Carballo.

Justo a la conclusión, tuvo lugar el momento más esperado por todos los asistentes: el descendimiento, mediante un sistema de poleas, de la imagen del Santísimo Cristo de la Expiración, que preside todo el año el altar de la Iglesia de San Pedro-San Isidoro.

Una vez descendida, entraron en escena varios miembros más de la Cofradía, ataviados con la vestimenta procesional, para desarrollar un besapiés a la imagen del Cristo, que fue iniciado por el capellán, Ángel Martín Carballo, y cerrado por el presidente, Antonio Aguilera.

Durante todo el besapiés estuvo sonando uno de los característicos tambores de esta Cofradía. El acto fue más largo de lo habitual ya que en el templo se habían congregado muchos más fieles que en años anteriores. Como recuerdo, todos ellos recibieron una estampa.

Una vez todos los asistentes besaron los pies del Cristo de la Expiración, la imagen fue llevada hasta la parte trasera de la Iglesia, donde podrá ser contemplada de cerca por los fieles hasta el momento de la procesión de la Cofradía, en la noche del Jueves Santo (a partir de las 23.00 horas).

Concluido el besapiés, la Hermandad celebró en el propio templo su Junta General Ordinaria Anual, en la que se presentó el balance económico del año 2013, y se informó de algunos aspectos de la Cofradía, como la adquisición de guantes para que todos los cofrades lleven el mismo tipo durante la procesión.

También se explicó que en la actualidad la Hermandad cuenta con unos 485 cofrades. En el tramo final de la Junta se hizo entrega de una serie de medallas especiales a los cofrades más antiguos de la Hermandad.