Las disputas entre el presidente Ángel María Villar y Miguel Cardenal son el origen del conflicto de huelga
Si nadie lo remedia, el fútbol salmantino parará este fin de semana, así como el de toda Castilla y León. La Junta Directiva y la Comisión delegada de la Asamblea General de la Federación de Castilla y León de Fútbol ha acordado, en reunión conjunta celebrada en el día de hoy, la paralización de toda las competiciones organizadas por sí o por encomienda de la Real Federación Española de Fútbol, que se tendrían que celebrar el próximo fin de semana, 14 y 15 de febrero.
Esta medida se efectúa en defensa de los intereses del fútbol base español, siendo las principales causas las siguientes:
1º) El estudio realizado por el Consejo Superior de Deportes y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, en virtud de la Disposición Adicional 16º, de la Ley 14/2013 de apoyo a los emprendedores, sobre la relación jurídica y encuadramiento de la actividad desarrollada por los clubes y entidades deportivas del fútbol base y aficionado, que obligan a la contratación laboral y cotización al Régimen General de la Seguridad Social de todas las personas relacionadas con la actividad de los clubes (monitores, entrenadores, futbolistas?), así como la aplicación de modificación introducida en la Ley del Impuesto de Sociedades, que afecta a las entidades sin ánimo de lucro.
Es por ello que solicitamos se desarrolle una regulación propia y específica para el deporte no profesional, contemplando sus peculiaridades, pues de lo contrario muchos clubes de fútbol se verán abocados a la desaparición, por la falta de dirigentes que quieran asumir las posibles responsabilidades personales por las potenciales infracciones a la Seguridad Social y a Hacienda, reduciendo al mínimo los directivos y voluntarios que altruistamente colaboran con el fútbol base.
2º) Disconformidad con el reparto de fondos de las quinielas ante las discriminación efectuada entre el fútbol profesional y el no profesional y que afecta fundamentalmente a la mejora y creación de nuevas instalaciones dedicadas al fútbol no profesional, no aceptando la merma de unos ingresos importantes para la mejora de las instalaciones deportivas en una Comunidad tan necesitada de las mismas.
3º) Disconformidad con la cantidad discriminatoria que al parecer otorga al fútbol no profesional, el Real Decreto de la Comercialización centralizada de los derechos audiovisuales de las competiciones profesionales. Cantidad, de esta manera, enteramente insuficiente para emplearse en potenciar el fútbol no profesional
4º) Paralización por parte del Consejo Superior de Deportes a numerosas iniciativas reglamentarias que quiere implantar la Real Federación Española de Fútbol y que perjudican notablemente el desarrollo de nuestro deporte.