SALAMANCArtv AL DÍA acompañó en los primeros tramos de la madrugada de la Nochebuena al día de Navidad al voluntario Juan José García Carabias, quien describió el perfil de las personas que recurrieron a la ONG para expresar su desconsuelo (GALERÍA DE FOT
En una madrugada tan especial como la que transcurre entre la Nochebuena y la Navidad, el Teléfono de la Esperanza se mantiene en guardia. Son días en los que se disparan las emociones por diversas razones.
El final de un ciclo vital como es el año, la falta de compañía, los problemas derivados de esa soledad, las depresiones, el desempleo, las malas relaciones familiares, el desamor o la pérdida de seres queridos, centran el contenido de las numerosas llamadas recibidas en el Teléfono de la Esperanza.
SALAMANCArtv AL DÍA ha querido estar cerca de un voluntario en la madrugada de la Nochebuena para seguir su trabajo. El voluntario de la Organización No gubernamental (ONG) El teléfono de la Esperanza Juan José García Carabias ha estado atendiendo las numerosas llamadas recibidas en la sede.El denominador común en todas ellas es la soledad que padecen las personas que requieren la atención del Teléfono de la Esperanza. Algunas también por la necesidad de hablar y expresar sus sentimientos.
Lo importante es la escucha, no los consejos. El voluntario se mantiene en silencio mientras al otro lado del teléfono se escucha el desgarrador testimonio, el llanto, el lamento, la tristeza. Como tantas noches, aunque ésta haya sido especial, Juan José García Carabias permanece atento, sereno, con mucho equilibrio ?necesario en estos momentos-. Y como este voluntario, otros tantos en cada provincia de España, atendiendo a los más vulnerables. García Carabias, con amplia formación está entregado en cuerpo y alma a esta labor. Sacrifica la compañía de sus allegados y familiares para atender la salud emocional de los débiles.
Once años de escucha
El Teléfono de la Esperanza de Salamanca ha celebrado el pasado mes de noviembre su décimo aniversario. Una década en la que esta organización no gubernamental ha trabajado intensamente en la escucha y atención de personas en situaciones de crisis graves y urgentes y a la salud emocional en todas sus vertientes. Además de la escucha las 24 horas del día y del seguimiento presencial por parte de una serie de profesionales, "realizamos todos los años diversos cursos de desarrollo personal, en pequeños grupos, cada quince días", explican a SALAMANCArtv AL DÍA miembros del equipo coordinador de formación en el Teléfono de la Esperanza.CURSOS DEL TELÉFONO DE LA ESPERANZA
Más información en el teléfono 923-221111 Para inscripciones en estos cursos se aconseja pasar por la sede, en Paseo de Canalejas 56, 1º B, de 19,00 a 21,00 horas. http://www.telefonodelaesperanza.org/salamanca.
En el Teléfono de la Esperanza contribuyen a la mejora de la salud emocional de las personas, poniendo al alcance de los ciudadanos un servicio cualificado y gratuito que les ayude a superar sus problemas.
Además, siendo conscientes de la importancia de la prevención, sus promotores han creado unas "redes de ayuda preventiva" que promuevan el cuidado de la salud emocional a través de cursos, talleres, grupos de formación y autoayuda, seminarios, conferencias? y que fomenten en las personas una relación satisfactoria consigo mismas y con las que les rodean. Asimismo, el Teléfono de la Esperanza ofrece una formación específica a aquellas personas que poseen una fuerte motivación para echar una mano a otros seres humanos en situaciones de crisis emocional y que deseen desarrollar sus cualidades y las habilidades para la ayuda. Su objetivo, por tanto, es ayudar a formarse a los que quieren ayudar. Por otra parte, la asociación ha asumido también el reto de apoyar a poner en funcionamiento nuevos centros del Teléfono de la Esperanza allí donde se den las condiciones necesarias, es decir, donde haya una demanda de ayuda psico-emocional y exista un nutrido grupo de voluntarios con iniciativa y recursos para embarcarse en esta tarea.