Exodus: dioses y reyes, la liberación del pueblo de Dios

La nueva película de Ridley Scott ya está aquí, Exodus: dioses y reyes. Scott narra visualmente la historia de Moisés en la gran pantalla. Aquí hay que mencionar que es la primera vez que una historia del Antiguo Testamento luce tan bien en el cine. Así mismo, cabe decir que se trata de un remake porque la historia de Moisés se ha llevado varias veces al cine. Una de las películas más conocidas es la interpretada por Charlton Heston tantas veces emitida en Semana Santa, Los diez mandamientos. La nueva película de Ridley Scott le pasa por encima con la puesta en escena, el cartón piedra poco puede hacer frente a los efectos digitales actuales, pero será un clásico de la historia del cine.

Los efectos anteriormente mencionados, junto con la banda sonora, el vestuario y el maquillaje es lo mejor del filme que se puede mencionar. Tanto Christian Bale como Joel Edgerton dan vida a un Moisés y un Ramsés muy creíbles gracias a la caracterización acompañada de su actuación, pese a tener una profundidad bastante escasa los personajes. Una de las cosas que más se le ha echado en cara a Scott es la utilización de actores de ojos claros y tez blanca para dar vida a los egipcios, cuando teóricamente son un pueblo con rasgos arábigos. En controversia a todo esto, a día de hoy sigue sin saberse que aspecto tenían los egipcios del Antiguo Egipto.

También hay que mencionar las claras elipsis temporales de la película, con unos saltos en el tiempo muy drásticos para condensar la vida de Moisés en dos horas y media que honestamente se hacen eternas. Así como la breve mención a la historia de los niños hebreos sacrificados por una profecía en un diálogo muy forzado, o el viaje "exprés" de 40 años por el desierto (no es ningún spoiler está en el Éxodo de la Biblia)

Lo bueno de todo ello es que Exodus: dioses y reyes acerca la figura de Moisés a una generación que puede haber escuchado algo o nada de la figura del profeta bíblico, gracias a un remake con una puesta en escena muy vistosa y espectacular, como las diez plagas de Egipto o la división del Mar Rojo.