Los libros educativos digitales, según datos de la Asociación Nacional de Editores de Libros, han aumentado un 100%
Los recursos digitales disponibles para la docencia se multiplican exponencialmente. Según recoge un estudio de la Asociación Nacional de Editores de Libros y Material de Enseñanza (Anele) el catálogo de libros educativos digitales se ha incrementado casi un 100%, al pasar de 3.209 títulos en el curso pasado a 6.334 para el presente curso 2014/2015. Por otro lado, el número de webs y repositorios online de recursos educativos se multiplica exponencialmente en internet.
Incremento de libros de texto digitales
Anele, que agrupa al 96% de los editores que publican en España libros y materiales destinados a la enseñanza reglada no universitaria, afirma que la composición del catálogo de libros educativos digitales crece en cantidad y en calidad. Además del incremento del 100% para el presente curso señalado, desde la asociación explican que los libros de texto digitales son cada vez mejores.
Se ha pasado de libros digitalizados, simples PDFs de las páginas de los libros impresos en papel, a libros creados y pensados para el mundo digital que permiten a docentes y alumnos interactuar sobre los diferentes objetos digitales, compartir las modificaciones de los mismos y convertir la experiencia en un entorno mucho más participativo.
Webs de recursos didácticos
También crecen exponencialmente los recursos digitales didácticos disponibles en internet para su uso en las aulas. Estas son algunas de las webs más visitadas junto al número aproximado de recursos disponibles: Tiching: 348.541, Procomún: 68.000, Didactalia: 63.800, Agrega2: 90.893, Soloprofes.com: 1.160, Eduteka 929, EducaconTIC: 725 y Educaplus.org: 352.
En solo unos años, gracias al esfuerzo de las editoriales y de muchos maestros y profesores amantes la tecnología, el número de recursos digitales disponibles para ser usados en las aulas se ha multiplicado de forma vertiginosa.
Para Stephen England, distribuidor en España de la tecnología educativa Legamaster, "las pizarras digitales interactivas son un instrumento necesario en las aulas ya que multiplican las posibilidades de comunicación bidireccional de ideas y conceptos pero, obtener los mejores resultados exige a los docentes un cambio metodológico profundo. Aunque en los últimos años el personal docente está haciendo un esfuerzo más que notable, aún queda mucho por hacer. El cambio a la era digital en la docencia representa un paso de gigante, y va a llevar tiempo integrar a todos los profesores de todos los niveles de escolarización en lo que podríamos llamar la Educación Digital, pero es un paso ineludible. Ya no vale decir que la tecnología es pasajera y que no le afecta a los hábitos tradicionales del docente en clase, porque el proceso de cambio ya se ha iniciado, es irreversible e imparable", concluye.
Material de los propios docentes
Además de las editoriales, son los propios docentes los que más han ampliado la cantidad de recursos didácticos disponibles. Es un fenómeno creciente y, a medida que los docentes van incrementando sus conocimientos en el uso de las pizarras digitales, van creando nuevo contenido propio y colaboran con otros profesores en el desarrollo de más contenidos, ampliación de los temas, búsqueda de recursos, etc.
Los contenidos creados por los propios profesores se comparten en las páginas citadas y en muchas otras, habitualmente de manera gratuita bajo la licencia Creative Commons, y los que han sido creados por las editoriales suelen tener un coste de acceso temporal (un curso completo para la descarga de la correspondiente licencia de uso).
Fácilmente actualizables y ligeros
A diferencia de los libros de texto, los contenidos digitales pueden ir adaptándose a la actualidad, incluyendo los últimos avances tecnológicos, científicos y los últimos hechos históricos. Además los contenidos digitales permiten incluir los cambios curriculares derivados de las distintas normativas docentes y adaptarlos a las características y al programa pedagógico del centro. Todo ello con la ventaja añadida de que estos contenidos pueden ser consultados en las conocidas tablets, aligerando el peso de las mochilas de los alumnos.