La Asociación de Pescadores de la Cuenca del Águeda pide intervenciones en 13 presas

En el informe, APCRA ha analizado 18 presas situadas aguas arriba del Pantano del Águeda y de la presa de Irueña, repartidas por los ríos Agadón, Águeda, Mayas, Payo y Frío. Desde el punto de vista de la Asociación de Pescadores, sería necesario realizar intervenciones en 13 de ellas.

Por un lado, hay un grupo de 7 presas que APCRA considera que deben ser reparadas "con urgencia" porque están muy deterioradas.

Se trata de dos presas en el Río Frío (en el paraje Los Berros o Molino de Tío Enrique de Robleda y Peñaparda; y en el Molino del Galo entre Villasrubias y Peñaparda), otras dos en el Agadón (en el paraje Mata del Hoyo en La Atalaya, y en el Molino del Tío Nisio de Serradilla del Llano), una en el Águeda (La Ceña, entre Casillas de Flores y Navasfrías), otra en el Mayas (en el paraje Granadero de Robleda), y una última en el Río Payo (en el Molino de Caneiro de El Payo).

Según apuntan desde la Asociación, algunas de estas presas "ya forman paisajes desoladores y otras van camino de serlo". Mientras, hay otro grupo de 6 presas donde APCRA propone la creación de escalas piscícolas -que no existen en ningún punto de la provincia de Salamanca- para que así dejen de ser infranqueables para las poblaciones piscícolas.

Se trata de 3 presas en el Agadón (en el Molino de la Barquesera, en el Molino del Tío Ángel, y en El Pantano, de Serradilla del Llano), una en el Águeda (en el paraje La Junta entre Robleda y Fuenteguinaldo), otra en El Payo (Charco del Palo en El Payo) y una última en Río Frío (la Presa del Castaño entre Villasrubias y Peñaparda).

En su informe, APCRA expone su preocupación por algunas informaciones aparecidas en torno a la posible destrucción de numerosas presas. La Asociación pide que se destruyan solamente las "estrictamente necesarias", es decir, las que no formen masas de agua que generen lugares de protección para la conservación de las especies piscícolas.

Las personas que han elaborado el escrito remarcan "como ciudadanos que vemos en estas presas los lugares de refugio y alimentación de muchas especies", que "no se destruyan presas alegremente sino que se cuente, para tal fin, con el consenso de todas las partes implicadas". Además se incide en que la reparación de las presas no sólo beneficiaría a los pescadores, sino también a ganaderos o amantes de la naturaleza.

Lo que propone la Asociación de Pescadores a la Confederación Hidrográfica del Duero es que las reparaciones que menciona en su informe sean incluidas dentro de Cipríber, un proyecto promovido por la Confederación en los ríos de la Red Natura 2000 del suroeste de la provincia de Salamanca que tiene como finalidad recuperar y proteger las poblaciones autóctonas endémicas de cíprinidos.