ALBA DE TORMES| Las carmelitas han vestido a la Santa con el vestido elaborado hace un siglo para el triduo de la Transverberación
En estas fiestas de agosto hasta la imagen procesional de Santa Teresa ha podido lucir sus mejores galas; no solo porque estamos recordando el IV Centenario de su Beatificación, sino porque también hace un siglo (1914) se asistió a la renovación de la indumentaria y andas teresianas. Aquel centenario teresiano del 1914 demostró a todos, ante la afluencia masiva de peregrinos, que el signo más apreciado y venerado de los albenses: la imagen procesional de Santa Teresa del siglo XIX, bien merecía un cambio de look. Y así fue.
Ya en 1914 se estrenaron las andas procesionales de plata Meneses que las crónicas del Carmelo registran así: Este año de 1914, Tercer centenario de la Beatificación de Nuestra Santa Madre, se estrenaron las andas de la imagen de la Santa que sale en procesión. Son de plata Meneses. Se hicieron en Madrid con algunas limosnas que se recogieron y lo demás de la comunidad. Costaron 9.000 reales. (C-96, fol.107)
Pero la renovación llegó también a los vestidos de la imagen, un cambio que ideó y dirigió el Carmelita valenciano Salvador de la Madre de Dios. En Valencia se tejieron y bordaron tanto el hábito marrón como la capa en blanca en tisú y bordado de oro, exactamente en los talleres de Don Furto Burillo y compañía. Todo el conjunto quedará completado y estrenado en las fiestas de octubre de 1916 pero se estaba trabajando en ello desde 1914.Por eso, aquel centenario teresiano de 1914 fue benéfico para Alba en todas sus vertientes: afluencia de peregrinos, mayor hospedaje en Alba, apertura del sepulcro de Santa Teresa el 28 de agosto de 1914, incremento de la colección de estandartes, nuevas andas procesionales y nuevos vestidos de Santa Teresa. Y hasta cambiaron las mismas andas del Brazo.
Este año 2014, en las fiestas de agosto, las carmelitas han hecho un guiño a la villa: fue no sólo en octubre sino también en el triduo de la Transverberación, la imagen teresiana aparecía con sus mejores galas. Aquellas que son fruto de la devoción de hace un siglo? de aquel lejano 1914. Un cambio de imagen que todos hemos percibido.
* La historia de la imagen, de las andas y de los vestidos está documentalmente tratada por Manuel Diego en el libro de fiestas de octubre (2005, págs. 166-178; 2007, págs. 267-277).