El objetivo es "concienciar y adiestrar al personal que tendría que intervenir en caso de producirse una emergencia real"
Bajo el supuesto de una colisión entre dos aeronaves en el momento de la maniobra de aterrizaje por parte de uno de los aparatos, más de 300 personas han participado este miércoles en un simulacro aéreo en la Base Aérea de Matacán.
El objetivo de esta actividad es validar los planes de emergencia del Aeropuerto de Salamanca y de los colaboradores ante una catástrofe de esa magnitud. Según explicó el coronel jefe de la Base Aérea de Matacán, Martín Pablo Marcos, este tipo de actividades sirven para "concienciar y adiestrar al personal que tendría que intervenir en caso de producirse una emergencia real, coordinar a las organizaciones y dependencias implicadas en la respuesta de un accidente aéreo, comprobar la actuación de los medios humanos materiales pertenecientes a dichas organizaciones así como servir para la mejora de los procedimientos.
Diferentes pautas han marcado el desarrollado de este simulacro, en el que según ha manifestado el coronel, los resultados han sido positivos "sin novedad, según secuencia prevista y siguiendo los protocolos tanto a nivel operativo como táctico". A raíz del impacto producido por la colisión entre las aeronaves, el piloto de ésta última ha perdido el control del aparato y ha caído en las inmediaciones del aeropuerto, concretamente en Huerta. Mientras, la aeronave de pasajeros ha sufrido un incendio en uno de los motores, ha perdido el control y ha tenido que hacer un aterrizaje forzoso en la propia pista de aterrizaje, lo que ha supuesto que el avión caiga contra el suelo y se ha declarado un incendio que los bomberos han tenido que apagar a tiempo real. Ante esto, se ha desencadenado la activación PLACAL por el elevado número de fallecidos y heridos graves.
Según los datos conocidos al final del simulacro, han participado un total de 53 figurantes + 2 en avioneta como pasajeros o tripulantes de los aviones siniestrados; un total de 7 personas fallecidos; 9 personas muy graves (2 personas quemadas trasladadas al Clínico de Salamanca y 1 persona trasladada a la unidad de quemados de Valladolid) y 35 personas ilesas.
En el accidente han colaborado diferentes instituciones entre las que se encuentra la Subdelegación de Gobierno y Protección Civil, la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León, Protección Civil de la Junta de Castilla y León, 112 y medios sanitarios de SACYL, Emersan, con una ambulancia asistencial y dos técnicos en transporte sanitario, Diputación de Salamanca con su sección de Bomberos, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, personal perteneciente a AENA y el propio personal de la Base Aérea de Matacán.