Para llegar a ser maestros en materias como la música, el arte, el diseño, el toreo o el fútbol, se necesita una práctica continuada de 3 horas diarias durante 10 años? Es como una letanía sagrada, si se quiere llegar a la cima antes debe practicarse de manera continuada unas 10.000 horas. Esta cifra mágica debería ser un auténtico "mantra" en el desarrollo profesional. Sin embargo, Goleman como experto en inteligencia emocional alerta en su libro "Focus" que tal aseveración puede resultar una "media verdad" y cita a Anders Ericcson, psicólogo de la Universidad de Florida: "De poco sirve la mera repetición mecánica. Es necesario, para aproximarse a nuestro objetivo, ajustar una y otra vez nuestra meta". Sin duda, un matiz fundamental por cuanto las repeticiones sin inteligencia práctica no servirían tampoco para mucho?
Recuerdo a un compañero, y sin embargo amigo, que nos repetía: "Nadie puede saltar más allá de su propia sombra". Con ello nos alertaba sobre el voluntarismo más singular que rige tantas veces en lo profesional. También habrán escuchado ustedes, en un campo de fútbol, a algunos aficionados insensatos que, con una sonrisa presuntuosa, esgrimen argumentos como éste: "¡Si a mí me pagaran lo que a "ésos", yo metería goles con la punta de la coronilla?!" O lo que es lo mismo, piensan que el dinero mueve voluntades imposibles? Imaginen lo difícil que hubiera sido para Roberto Carlos, un magnífico defensa lateral izquierdo que jugó en el Real Madrid, destacar como portero; o jugar al baloncesto, cuando precisamente medía en torno a 160 centímetros?
Por eso mismo, me solivianta esa adoración injustificada a los niños futbolistas de 11, 12, 13 ó en torno a 14 años, los suben a los púlpitos con propaganda desmesurada solo porque manejan un balón de cuero con cierta soltura. Y los tildan de "mágicos", "maravillosos", "superclases", "marcianos", "elegidos", y toda una maraña de superlativos acuñados para estos casos. La realidad es que son imberbes aprendices de futbolistas a los que les faltan 6, 7 o más años de aprendizaje tenaz. Lo más aleccionador es que pueden potenciar sus capacidades y ser buenos profesionales con esas horas de trabajo programado y sin necesidad de ser genios innatos?