La llegada de las cigüeñas nos anuncia una primavera floreciente, verdadero estímulo para renovar ilusiones y alentar nuevos sueños con los que romper la gris realidad que nos atenaza. En materia artística, la estación de los amores que diría mi admirado Franco Battiato, se presenta con exposiciones muy recomendables: Cézanne, Le Corbusier, Arcimboldo, Darío de Regoyos y un largo etcétera se unen a las celebraciones del año del Greco. Entre esta fragosidad expositiva, llega a España "Pixar. 25 años de animación". Caixaforum, tras una itinerancia internacional, acoge la muestra organizada por primera vez en el MoMA de Nueva York concebida como un auténtico tributo a los artistas cuyo trabajo ha reinventado el género de animación. Desde 2006, esta muestra ha recorrido numerosas ciudades, esta primavera le toca el turno a Madrid.
En 1986, solo unos pocos expertos habían oído hablar de la animación por ordenador. Un cuarto de siglo después, Pixar es un símbolo del talento y la innovación en el cine de animación. Desde el estreno de Toy Story (1995), el primer largometraje creado en su totalidad con efectos de animación digitales, Pixar Animation Studios ha continuado produciendo películas de animación de gran éxito, tanto de taquilla como de crítica, atesorando 26 premios Óscar y 7 Globos de Oro.
La exposición presenta más de 500 obras de arte originales entre storyboards, dibujos, pinturas, pasteles, bocetos conceptuales, collages, esculturas, miniaturas y una gran variedad de instalaciones digitales que revelan todo el intricado proceso creativo que hay detrás de cada una de las películas y cortos. A través de este recorrido, los visitantes podremos descubrir el mágico mundo de los estudios Pixar y profundizar en los elementos necesarios para la realización de una buena película de animación: personajes creíbles y bien definidos, buenas historias y la creación de magníficas ambientaciones. La intersección entre arte y ciencia se podrá apreciar disfrutando de instalaciones como "Artscape" que mediante la tecnología de tres dimensiones hará que los visitantes experimenten escenas de las películas desde la perspectiva de sus personajes.
Pixar ha reinventado el género de la animación al ser pionera en la fusión de medios tradicionales, como el dibujo y la escultura, con la tecnología digital. Las innovaciones formales y estilísticas que ha introducido este estudio norteamericano llegarán a tener un impacto histórico similar al que tuvo el cine en el siglo XX. El virtuosismo en las imágenes, el riesgo en algunas propuestas de guión (como en el caso de Brave ?Indomable-, que con apariencia de cuento de hadas tradicional supone una apuesta por la defensa de la mujer y su lugar en la sociedad, haciendo de Mérida, la heroína protagonista, de carácter y melena indomables, toda una expresión de valentía), la capacidad de sorpresa y la meticulosidad en el detalle son marca de la casa.
John Lasseter, director creativo y cofundador junto a Steve Jobs de este estudio de animación, promueve la creatividad y el talento de los artistas que trabajan en Pixar. Se les pide que tengan una gran habilidad para dibujar desde cualquier ángulo, que sean capaces de comunicar claramente emociones a través de unos personajes que cobran vida en la pantalla y que tengan un gran conocimiento cinematográfico, pues las referencias a otras películas son continuas en las historias de Pixar. Y es que John Lasseter busca creativos y no ejecutivos para realizar sus proyectos. Busca historias que le apasionen y así poder contagiar su pasión por esa historia. Relatos cargadas de energía positiva, llenos de emociones y que transmiten valores como la amistad, la solidaridad, la superación, el esfuerzo y la ilusión por alcanzar tus sueños. Todo ello contado y vivido a través de unos personajes fascinantes, difícilmente olvidables.
Carmen Calvo, último Premio Nacional de Artes Plásticas, afirmaba recientemente en una entrevista concedida con motivo de la entrega de su premio que "Si pierdes la ilusión estás muerta". Pixar Animation Studios es un ejemplo de complejidad y belleza, de tecnología y tradición, de innovación y emoción puesta al servicio de historias auténticamente ilusionantes que no debemos perdernos. Necesitamos ilusión y nuevos sueños para seguir avanzando.