Apreciable rey Juan Carlos: Discúlpeme las bromas, pero está Su Majestad con tan buen aspecto que parece un republicano. Se lo digo de corazón. No sé quién le habrá donado la sangre azul para su operación, espero que no haya sido un crédito cero negativo de los que luego traen problemas. El talante que esbozó en su felicitación navideña me recordó al Rey de la transición y de muchos años de democracia. Parecía Su Majestad el mismísimo don José Luis Rodríguez Zapatero. Aunque lo suyo no sea defender ningún Programa, solo se le pide ser conciliador, mientras el pobre don José Luis, por respetar el programa prometido a la clase media y a los pobres, desoyó la crisis promovida por los ricos, hecho que le costó la "defenestración" política, y ya sabe Su Majestad que otro vendrá y aprenderá, o algo así, y en este caso fue don Mariano quien llevó dos programas, uno para enseñar y otro en "B" con el que algunos a costa de otros están ganando muy buenos dividendos.
Pero hablemos de Su Majestad y, por supuesto, bien, pues hay que recordar que en el año 2013 que termina Su Majestad nos ha emocionado con una inculpación que no estaba en el manual de los reyes. Fue aquel "perdón" real por resbalarse y poner en juego su salud y la Jefatura del Estado. Ese perdón no lo había pedido en nuestra historia ni el mismísimo rey de copas. Y en lo que a mí respecta, queda usted perdonado. Además de desearle mucha salud para el año venidero, que a la vista está, lo de "a cuerpo de rey" su cuerpo no lo aguanta.
No obstante, la Corona, después de tanto tiempo dando de manera exitosa testimonio de democracia, parecía haberse relajado hasta dar la impresión de morir de éxito y cuando esto ocurre se tarda tiempo en resucitar. Estoy seguro que hemos retomado el camino adecuado, pues son muchos los que no quieren que España sea un país que tenga que elegir, de la A a la Z, un jefe de Estado entre personajes quemados por la política, que no fue el caso de un intelectual de la A a la Z como Azaña, jefe de Estado en la 2ª República. Así, el mejor valor de su Monarquía es el ejemplo, pues la Corona está refrendada por los españoles dentro de la Constitución pero son muchos los que echan en falta un plebiscito Monarquía vs. República.
Si recordamos la Historia, Su Majestad sabe que el pequeño generalísimo trató de que el padre de usted fuera un títere para la dictadura, un intento inútil, ya que don Juan apostó por la dignidad y mantuvo el mínimo contacto con el general. Tampoco le íbamos a pedir que conspirara contra él, pues quienes vivimos la dictadura ?en mi caso hasta los 22 años? sabemos que a Franco se le confundía con dios y aquello era imposible. Mejor sea que la manera de actuar de su padre le enorgullezca.
Por último, siento decirle que el futuro no está asegurado. Y no será por falta de preparación del Príncipe, que puede ser tanto su sucesor como un buen presidente de República. Pero Su Majestad sabe que en España hasta el mismísimo Jaime Peñafiel se confiesa republicano, con lo que la tercera república no es ninguna entelequia, ya que ese sentimiento se tiene no solo por ideología, sino por rechazo a la sucesión familiar o por romanticismo, y en nuestra España se suman otras razones como son las heridas sin cerrar, sobre todo las de aquellos compatriotas que fueron ejecutados por defender un sistema legitimado en las urnas y sus cuerpos se encuentran tirados en las cunetas. Quizá sobre la Memoria Histórica rogaría a Su Majestad que hiciera algún pronunciamiento.
Con afecto, Feliz Año 2014.