El último informe del Instituto Nacional de Estadística referido al primer semestre de 2013, hecho público el pasado día 10 de este mes de diciembre, refleja unos datos que no por esperados son menos sorprendentes
Destaca el descenso de la población española en relación con el año 2012, en 118.238 personas; esta disminución se debe a dos factores principales: por un lado a la disminución de la población extrajera que se redujo en 202.193 personas, bajando por primera vez en muchos años de los cinco millones, aunque solamente han retornado a sus países de origen 50.000 extranjeros, el resto han adquirido la nacionalidad española.
Por otro, el número de españoles que emigraron fuera de nuestro país alcanza los 40.000 cuyos destinos principales fueron Reino Unido y Francia; de estos 40.000 emigrantes, 15.000 retornaron, por tanto en el número total de habitantes que dejaron nuestro país en este semestre es de 25.000.
En cuanto a las Comunidades Autónomas resulta curioso que todas hayan perdido población, excepto Ceuta y los dos archipiélagos fuera de la península, y la Región de Murcia con un 0,07% como única Comunidad Autónoma peninsular.
¿Y que sucede en Castilla y León? Se encuentra entre las cuatro comunidades que más población han perdido, siguiendo la misma línea de los últimos años. Nuestra comunidad es una de las más avejentadas del país, y no solamente en cuanto a habitantes, estamos a la cola en PIB, en industrialización, en servicios, en investigación, en tantas cosas??
O cambiamos nuestra tendencia derrotista en todos los campos o estamos abocados a sufrir una continua y progresiva desertización. Alguien debería tomar medidas.