Desde pequeños nos enseñan que "copiar" está mal. Tapábamos el cuaderno con una mano e incluso con el brazo entero, mientras escribíamos con la otra, y con el rabillo del ojo vigilábamos al compañero para que no "copiara". Nos han educado en un sistema con muchos exámenes donde está penalizado copiar. Un sistema en el que había que hacer pocos trabajos en grupo.
Así crecimos, y de esas aguas estos lodos? Ahora nos piden que sepamos trabajar en equipo?
Muchos son los emprendedores que no comparten su idea de negocio por miedo a que se la copien, sin darse cuenta de lo difícil que es ésto. Si no me crees, prueba a emprender un negocio y convencer a alguien para que te preste dinero? Ni haciendo pública la idea dando a conocer las bondades más maravillosas y de la mejor manera posible consigues encontrar un socio capitalista ¡como para pensar en que alguien quiera robarte la idea!
Lo que hay detrás de ese miedo, en muchas ocasiones no es el robo de la idea, sino el miedo de que otro esa capaz de ponerla en practica mejor que tú, sin darnos cuenta de que si te tienen que copiar algo, no una idea que todavía no saben si será rentable, sino un negocio que funciona. Y entre la idea y el negocio hay muuuuucha distancia.
Cualquier emprendedor debe tener un par de cosas claras: No hay mucha gente, y menos en España, que se atreva a emprender, de los que se atreven, hay pocos a quienes le interese tu sector, y de haber algún emprendedor, con interés en tu sector y dinero para llevar a cabo la idea, lo más probable es que espere hasta ver si tu idea funciona, incluso si lo hace antes, lo realmente importante es la ejecución de la idea, no la idea en sí misma, así que si te terminase copiando, alégrate, porque igual podrías copiarle tú a él, el modelo de negocio.
Por otro lado, compartir tu idea con otras personas te dará mucha información y muy importante. Lo que necesitas ahora no es lo que ya conoces, sino lo que no está en tu cabeza y que sólo los demás te pueden decir. Ojo, no estoy diciendo que te dejes influir por los miedos de la gente, ni los egos ajenos. No faltarán personas que te digan que son tonterías o que eso es imposible? No te preocupes por ellos, porque éstos nunca, nunca te robarán la idea. Pero como se suele decir, si en un equipo 10 piensan igual? sobran 9.
Un ejemplo de la utilidad de compartir: Hace una semana, haciendo cola para pagar en la caja de un supermercado se me ocurrió esta idea para suprimir las largas y tediosas colas para pagar en las cajas del supermercado. Analicemos el proceso que genera las largas colas:
Entramos en el super, cogemos un carro y nos recorremos todos los pasillos vaciando las estanterías y llenando nuestro carro con productos cuyo precio ya conocemos. Hasta aquí todo bien, ninguna cola, casi ninguna espera salvo en algún pasillo un poco atascado, pero con un "disculpe!" todo se arregla. Ya con el carro lleno es cuando nos dirigimos a las odiosas cajas con interminables colas. El caso es que miramos a ver cuál es la que tiene menos cola. Este proceso tiene que ser rápido por temor a que llegue el listillo de turno y se te cuele, así que tomas la que será la más importante decisión desde que llegaste al super, rápidamente haces el cálculo de una complicada ecuación mental que te posicionará en la caja más rápida y para ello tienes en cuenta variables como el número de personas, la edad de éstas, la cantidad de alimentos que llevan en sus cestas o carros, etc., pero inevitablemente hay otros factores que no puedes tener en cuenta. Una vez en la cola, como no tienes otra cosa mejor que hacer, te dedicas a mirar a tu alrededor para confirmar si tomaste la decisión correcta a la vez que rezas para que no le toque el cambio de turno la cajera de tu fila, ni haya ningún inconveniente con el típico producto que no pasa por el lector o con las tarjetas de crédito. El caso es que cuando te toca, vuelves a vaciar tu carro, pasan todos los productos por la máquina que detecta el precio? que ya conocemos! y vuelves a meter en el carro toda la comida. Y la pregunta es? ¿si ya estaba en el carro y ya conocíamos el precio, para qué sacarla y volverla a meter!!!???? No tiene sentido!!!
Mi propuesta: Poner todos los productos de las estanterías en alguna especie de caja con un lector de tarjeta y que para que salga el producto de la caja, tengas que pasar una tarjeta del supermercado, donde se guarde la información de la cantidad de productos que has sacado. Con tu carro bien lleno y la información en tu tarjeta, pasas por la caja y? voilà, no tenemos que vaciar el carro para luego volverlo a llenar. Le damos la tarjeta del super a la persona que está en la caja junto con nuestra tarjeta de crédito y asunto solucionado, ya no hay colas!!!!
La idea es maravillosa, tanto que ¡ya existe!. Soluciona un problema real y tiene beneficios claros para el cliente.
Lo mejor que me ha podido pasar es que al compartir la idea me he enterado de su existencia. Me he ahorrado tiempo y quien sabe si dinero?, igual me hubiese animado a patentar un sistema parecido al existente, pero en el que nadie invertiría. Adiós a mi ego, hola a mi tiempo y a mi dinero, y todo esto gracias a mis ganas de compartir.
Ramón Cristobalena @RCristobalena.