La intervención, adjudicada por la Diputación de Salamanca, busca poner fin a los largos desvíos que sufren los vecinos de la comarca desde el pasado mes de marzo.
Los trabajos para asegurar la ladera y restablecer la circulación en la vía que une Pastores con Martiago ya están en marcha. La intervención, adjudicada por la Diputación de Salamanca, busca poner fin a los largos desvíos que sufren los vecinos de la comarca desde el pasado mes de marzo.
Vecinos de las localidades de Vegas de Domingo Rey, Agallas y Martiago observan con optimismo el inicio de las actuaciones sobre el terreno. Desde hace un par de semanas, la maquinaria trabaja en la zona para asegurar las paredes del conocido como Risco de Martiago, un punto crítico de la orografía local que obligó al cierre total de la carretera por motivos de seguridad.
La vía afectada es la DSA-359, una arteria fundamental para la comunicación entre estos municipios. El paso de vehículos quedó totalmente restringido el pasado mes de marzo tras producirse un gran derrumbe de rocas y tierra sobre la calzada. Ante el peligro inminente de nuevos desprendimientos, las autoridades decidieron cortar el tráfico, una situación que se ha prolongado durante nueve meses.
Las obras han sido impulsadas por la Diputación de Salamanca tras completar los trámites administrativos necesarios. La intervención cuenta con un presupuesto de adjudicación de 233.874 euros (más IVA), cifra por la que finalmente se ha contratado el servicio, aunque el presupuesto base de licitación ascendía inicialmente a 300.000 euros.
La empresa encargada de ejecutar los trabajos es la firma catalana SOLUTIOMA S.L., especializada en la estabilización de taludes y control de la erosión. El objetivo principal es garantizar la estabilidad de la ladera para evitar futuros incidentes y permitir la circulación segura de vehículos.
Según el pliego de condiciones establecido por la institución provincial, el cronograma de la obra es el siguiente:
El corte de la DSA-359 ha supuesto un importante contratiempo para la vida diaria de los habitantes de la zona. Durante estos nueve meses, los conductores se han visto obligados a utilizar rutas alternativas que implican un considerable aumento en el tiempo de desplazamiento y en la distancia recorrida.
Los desvíos actuales obligan a transitar por el Risco de la Herguijuela o por la localidad de El Sahúgo, sobrepasando la Presa de Irueña. Estas carreteras secundarias no solo alargan el trayecto, sino que presentan una mayor peligrosidad debido a su trazado.
Esta situación ha afectado especialmente a los vehículos industriales de reparto y transporte de mercancías, que han tenido que afrontar mayores costes y dificultades logísticas para abastecer a los municipios afectados. La reapertura de la vía principal es una demanda urgente para recuperar la normalidad en las comunicaciones de esta zona del suroeste salmantino.