La histórica finca de Traguntía inicia una nueva etapa bajo la dirección de Almudena Porres y Andoni Rekagorri con unas jornadas de puertas abiertas. La inauguración ha contado con un singular belén de madera de encina creado por el escultor Ángel Martín Carreño en la ermita de la finca
La finca 'El Cuartón de Inés Luna', situada en el término municipal de Traguntía, ha iniciado una nueva y prometedora etapa cultural y social. La nueva dirección, encabezada por Almudena Porres y Andoni Rekagorri, ha inaugurado este fin de semana la primera de las jornadas de puertas abiertas que marcarán el devenir de este histórico palacete de principios del siglo XX. El evento central de esta apertura ha sido la exposición de un belén muy singular que se encuentra en la ermita de la finca, una obra de arte creada por el escultor Ángel Martín Carreño, de La Fuente de San Esteban, que ha logrado fusionar la tradición navideña con la esencia más pura de la dehesa salmantina.
Estas jornadas, que se desarrollan durante los días 20, 21 y 22 de diciembre, facilitan a los visitantes adentrarse en el universo creativo de Martín Carreño y conocer de primera mano el nuevo enfoque de gestión del espacio. La iniciativa ha contado con el respaldo institucional de la subdelegada del Gobierno y presidenta de la Fundación Inés Luna Terrero, Rosa López, así como del alcalde de Vitigudino, Javier Muñiz, quienes han asistido a esta primera jornada inaugural junto a numerosos vecinos de los municipios de la zona.
Almudena Porres ha explicado la filosofía que impregna este renacer de El Cuartón. Según ha detallado, no se trata solo de gestionar un alojamiento, sino de construir algo más profundo. "Para nosotros esto es un proyecto con varias vertientes: una vertiente rural y ganadera, nosotros somos ganaderos; y queremos que tenga una vertiente social, queremos convivir con las personas de aquí", ha afirmado. Aunque llevan 35 años vinculados a Salamanca, la nueva dirección ha buscado con esta iniciativa "convivir de una manera como más desde el proyecto, desde las actividades que podamos desarrollar aquí".
La llegada de Almudena Porres y Andoni Rekagorri a la finca de El Cuartón supondrá un nuevo formato de gestión conforme a cómo ha sido desde la restauración del palacete de Inés Luna. A partir de la llegada de la nueva dirección, la finca El Cuartón estará abierta a grupos que deseen vivir experiencias ligadas a la naturaleza, al arte y al toro bravo, además de eventos especiales.
Ahora, la elección de Ángel Martín Carreño para esta primera actividad cultural no ha sido casual. La conexión entre la obra del artista y el entorno de la finca es absoluta. El escultor utiliza materiales autóctonos para dar vida a sus creaciones, algo que Porres ha valorado profundamente: "Él recoge piezas, troncos, cortezas de la dehesa, los transforma, les da vida, y para nosotros es una vinculación desde lo esencial con lo que nosotros hacemos". Esta simbiosis entre arte y naturaleza es el eje sobre el que pivotará la oferta de El Cuartón, que ofrecerá experiencias ligadas al toro bravo, el arte y el entorno natural.
Un belén que busca al niño interior del espectador
Por su parte, Ángel Martín Carreño ha descrito su obra con emoción, destacando el material noble que ha servido de base para este nacimiento: "Todo ello es en madera de encina. Utilizo esa materia que nos da la dehesa, la dehesa de Salamanca, el Campo Charro, y jugamos con la riqueza de nuestra propia tierra". El artista ha confesado que su trabajo busca despertar al niño interior del espectador, "jugando siempre con las formas, el movimiento y la locura que es el sentir la niñez, el querer volver otra vez a ser niños".
Las figuras que componen este belén destacan por su estilo abstracto y dinámico. Según ha explicado el propio autor, "todas ellas tienen movimiento, pero aparte de tener movimiento en juego, quiero que cada una de las personas que se acerquen a este belén jueguen con su imaginación y con su corazón". A pesar de la abstracción, la obra no carece de detalle, incluyendo a todos los personajes tradicionales: "Están los carpinteros, están los aguaderos, están los panaderos, están los agricultores, están los que están al fuego, los pastores... no le falta detalle", ha asegurado Martín Carreño sobre unas piezas que ha calificado como "únicas".
Apoyo a la cultura rural
La subdelegada del Gobierno, Rosa López, ha mostrado su satisfacción por la puesta en marcha de estas iniciativas que dinamizan el entorno rural. "Me parece que es una maravilla, creo que hay que apoyar mucho más a nuestros artistas locales y apostar por el arte en el campo", ha declarado López. Para la presidenta de la Fundación, la cultura es un pilar fundamental para la zona: "Aquí tenemos pequeños museos, exposiciones, fundaciones, y creo que esto es muy importante, que la cultura es lo más importante que tenemos".
Mirando hacia el futuro, Almudena Porres ha adelantado que esta actividad es solo el comienzo de un calendario estructurado en torno a las estaciones. "Tenemos en el proyecto de 2026 otras cuatro ediciones, que serían en las distintas estaciones, porque también hemos ido viendo que El Cuartón, como parte de la naturaleza, cambia muchísimo", ha señalado. El objetivo es realizar eventos vinculados a la cultura en primavera, verano y otoño, repitiendo el formato de puertas abiertas en las fechas previas a la Navidad.
Esta filosofía de apertura recupera el espíritu de la propia Inés Luna Terrero. "Sabemos que ella abría su casa también a actividades y a tertulias. Era una persona con ese aperturismo social también", ha recordado Porres, quien ha añadido que recuperar esa tradición "favorece a la convivencia de la población, de las gentes, del vecindario".
El belén de Ángel Martín Carreño está disponible para su visita, con entrada libre, en la finca El Cuartón situada en el kilómetro 22,4 de la carretera SA-315, ofreciendo una oportunidad única para disfrutar de la fusión entre el arte contemporáneo en madera y la historia de uno de los edificios más singulares de la provincia. Este belén podrá verse domingo y lunes de 10:00 a 20:00 horas.