Una carpa instalada por el Ayuntamiento permitió resguardar a público y matanceros.
Navasfrías celebró en este fin de semana del puente de la Constitución y la Inmaculada un programa de actividades que combinó el ambiente navideño con la arraigada tradición matancera propia de la comarca.
La tarde del sábado 6 se abrió a las 16:00 horas con la "Búsqueda del tesoro navasfrieño", un escape room concebido como aventura física y mental para participantes de todas las edades en la plaza Ramos Andrade. La propuesta dio paso a una chocolatada con churros —a un precio simbólico de tres euros— que contribuyó a templar el ambiente en una jornada menos fría de lo habitual para estas fechas.
El acto más emotivo llegó con el encendido navideño del municipio, acompañado de una tirada de farolillos voladores en la que participaron numerosos vecinos, un gesto luminoso que despertó especial entusiasmo entre los navasfrieños.
El domingo 7 de diciembre la atención se trasladó al albergue de 'El Bardal', escenario de la tradicional Matanza del cerdo. Los asistentes pudieron disfrutar de un almuerzo típico, participar en talleres de elaboración de embutidos y acceder a un sorteo de diferentes piezas del animal.
A pesar de la ligera lluvia que durante la mañana cayó sobre todo El Rebollar, vecinos, oriundos y visitantes portugueses fueron acercándose al recinto, donde la música de gaita y tamboril, junto con licores y aguardientes de la zona, animó el ambiente. El Matancero de Honor, Agapito Mateos, y los expertos Juan Miguel, Jorge, Rubén y Paco avanzaron las labores entre la atenta mirada de numerosos niños, que en ocasiones se animaron a colaborar.
Una vez chamuscado el cerdo, cuyo peso en vivo alcanzó los 265 kilos, los matanceros continuaron con el despiece bajo la carpa instalada para protegerse de la lluvia, lo que permitió al público seguir de cerca cada fase del proceso.
La jornada concluyó con una comida colectiva servida por Cátering Gabriel, empresa de Alba de Tormes, que puso el broche final a un encuentro festivo y comunitario muy arraigado en la vida local.