Las peñas lo dan todo en las divertidas pruebas de habilidad y las fiestas continúan con la verbena de la orquesta 'Timanfaya' y un martes dedicado a los niños y una parrillada final
La jornada de este lunes, 7 de julio, en las fiestas de Boada ha comenzado con un excelente sabor de boca y ha continuado con una tarde cargada de diversión y risas, sirviendo como un perfecto ecuador para unas celebraciones que enfilan ya su recta final.
Tras un fin de semana de intensas emociones taurinas, vecinos y visitantes se han reunido al mediodía para reponer fuerzas en una gran paella popular. Un momento de confraternidad que ha permitido coger impulso para las actividades de la tarde.
La diversión ha llegado a su punto álgido con el esperado Humor Amarillo, organizado por Encierros Infantiles Huertos. Las peñas del pueblo, divididas en cuatro equipos, lo han dado todo para superar las ingeniosas y resbaladizas pruebas, provocando las carcajadas de un público entregado.
Los participantes demostraron su habilidad y, sobre todo, su buen humor en una serie de desafíos que incluyeron unas 'vertiginosas' carreras de churros, divertidos juegos de agua y bolas, pruebas con globos que pusieron a prueba la coordinación y el temido 'palo desequilibrador', donde mantener el equilibrio era casi una misión imposible.
El equipo ganador fue el verde, logrando como premio una paleta que compartieron con el resto de equipos. El equipo amarillo logró la segunda posición, por lo que se llevó un lote de embutido y una botella de vino, que también compartirían con el resto. Y el tercer lugar sería para el queipo rojo, que obtendrçia una cuña de queso.
La nota agridulce de la jornada fue la suspensión del II Caballo Cagón, un evento en el que había depositadas grandes expectativas, y que no pudo celebrarse debido a un problema de suministro de última hora.
Lejos de decaer, el ánimo festivo continuará esta misma noche. A partir de las 23:00 horas, la plaza se llenará de música y baile con la actuación de la orquesta 'Timanfaya', que pondrá el broche a este lunes.
Mañana, martes 8 de julio, las fiestas de Boada llegarán a su fin con un día especialmente dedicado a los más pequeños y a la hermandad entre vecinos.
A las 18:00 horas se instalará un gran Parque Infantil que promete ser el paraíso de los niños. La instalación contará con castillos de agua, colchonetas, un toro mecánico, un tren turístico, kars y una refrescante y divertida fiesta de la espuma para combatir el calor.
El punto y final a cinco intensos días de celebración lo pondrá la cena campera 'Parrillada' a las 21:00 horas. Para asistir a este último acto de confraternidad, será necesario haber adquirido previamente los tickets en los establecimientos locales, cerrando así las fiestas con el mejor sabor de boca.