Tras la salida de hasta cuatro pasos, además de la Dolorosa en espera de cerrar la procesión, la lluvia hizo acto de presencia y obligó a su regreso inmediato a la iglesia, lugar donde el público pudo asistir a un concierto de la Banda de CC.TT. de la Cofradía San Nicolás de Bari como premio a su fidelidad a estos actos
Aunque los claros se imponían a las nubes en Vitigudino a las ocho de la tarde, media hora después la llegada por el Oeste de un oscuro nublado descargaba agua y obligaba a suspender la procesión del Santo Entierro en Vitigudino.
Conforme a la hora anunciada, la Dolorosa esperaba a las puertas de la iglesia la salida del resto de los ocho pasos. La Banda de Cornetas y Tambores ‘San Nicolás de Bari’ marcaba el paso con sus tambores, y clarines y cornetas anunciaban la salida del Huerto de los Olivos, seguido del ‘Amarrao’ y El Nazareno. A continuación salía el Cristo de la Agonía y cuando ’las Angustias’ aparecían sobre el atrio se materializaba lo que muy pocos habían presagiado.
El presidente de la Cofradía San Nicolás de Bari, José Ángel Mota, ordenaba poner a cubierto con un plástico la imagen de la Dolorosa en espera de que la lluvia amainara, pero sucedió lo contrario. Un aguacero acompañado de rachas de fuerte viento provocaron que finalmente se tomara la decisión de suspender la procesión y el regreso de las imágenes que ya se encontraban en las calles.
En el interior de la iglesia se quedaron el Cristo de los Faroles, la Cruz y el Santo Entierro, acompañado por la Guardia Civil con su capitán Carlos Rodríguez al frente. Y como autoridad civil, el primer teniente de alcalde o alcalde en funciones por convalecencia del regido Javier Muñiz, se encontraba José Antonio Pérez Blanco, dispuesto a acompañar a la Dolorosa cerrando la procesión, pero todo se quedó en buenas intenciónes.
Y mientras los cofrades secaban las imágenes del agua para evitar su deterioro, José Ángel Mota anunciaba un regalo para aquellos que no faltaron a esta cita, como fue un pequeño concierto de la Banda de CC.TT. de la Cofradía, que de esta forma premiaban con su música a cuantos quisieron quedarse en la iglesia.
Para esta noche, si el tiempo lo permite, se espera la procesión de la Soledad, última de las procesiones de la Semana Santa vitigudinense. Con salida de la iglesia a las 23:30 horas, recorrerá las calles Santiago Fuentes, Santo Toribio, plaza del Convento -donde las monjas Agustinas Recoletas cantarán a la Dolorosa-, Santa Ana y Plaza de España, también con el acompañamiento musical de la Banda de CC. y TT. ‘San Nicolás de Bari’.