Termina en el puesto 18, pero con las mejores sensaciones mientras no tuvo problemas y su histórica victoria de la tercera jornada
Lorenzo Santolino (Sherco) ha llegado a la meta de su séptimo Dakar con el buen sabor de boca de su victoria en la tercera etapa, la primera de su vida, y su buena clasificación en la general hasta que empezaron los problemas técnicos. Una avería, aparentemente en el inyector, y un problema de gasolina le han apartado de su objetivo de acabar entre los mejores en la clasificación general, pero dejan un balance positivo por las sensaciones y el rendimiento que ha demostrado.
Santolino logra así llegar hasta la última etapa del rallye más duro del mundo, la cuarta vez que lo acaba en siete participaciones. Ha anotado su primera victoria parcial, en la histórica tercera etapa de esta edición en la que fue el más rápido, y termina decimoctavo en la general claramente lastrado por los problemas mecánicos. Hasta que estos empezaron, se había mostrado más sólido que nunca, ha logrado puesto entre los diez mejores en cinco etapa y marchaba noveno en la general con proyección hacia arriba. Se mantiene como mejor resultado su sexto puesto de 2021 y el noveno de 2023.
El cierre ha sido una última etapa de trámite en el caso de las motos, no así en los coches. Los pilotos de RallyGP salían a la pista en grupo, en una salida en línea tipo motocross, pero Santolino ha decidido tomárselo con calma. No tenía opciones de ganar puestos en la general y ha salido todavía mermado por el gran esfuerzo de hace dos días, cuando tuvo que empujar su moto en la arena durante casi una hora para llegar a meta.
La duodécima etapa no tenía mucha historia. Eran 61 kilómetros sobre arena y dunas que han visto el duelo directo entre los dos pilotos que se jugaban el título, Sanders (KTM) y Schareina (Honda). El australiano partía con la ventaja de su margen en la clasificación, nueve minutos que iban a ser suficientes. Se limitó a controlar al valenciano, rodaron juntos y llegó a meta como ganador de su primer Dakar. Schareina, su mayor oponente, se sube al podio y es el primer español que lo hace desde 2017; el francés Van Beveren (Honda) completa el podio final.
“¡Acabamos el Dakar! Carrera muy dura, pero muy contento, muchas emociones. El inicio fue muy bueno, con la victoria en la etapa tres, todo iba bien, aunque estaba un poco lejos del top 5, la prologo nos penalizó un poco. A partir de ahí fui manteniendo distancias hasta que tuve el problema con la gasolina. Ha sido duro, pero no he tenido caídas duras ni grandes sustos. Gracias a todos los que me siguen, a Sherco y a todos los patrocinadores que hacen posible que sigamos viviendo el sueño del Dakar. Espero que lo hayáis disfrutado tanto como yo”, ha comentado Santolino ya en meta.