Ver galería


LAS ARRIBES
Actualizado 02/11/2024 20:51:57
Ester Corredera

Cerca de 2.000 personas de los pueblos del Abadengo han participado hoy en una concentración para denunciar la lamentable situación en la atención sanitaria, con la suspensión de consultas médicas

Cerca de 2.000 personas de todos los pueblos de la comarca de El Abadengo se han concentrado hoy en la Plaza Mayor de Lumbrales para denunciar la lamentable situación de la atención sanitaria en la zona de salud de Lumbrales y exigir una sanidad digna en el medio rural. La situación que se ha agravado en los últimos meses con la supresión, cada vez más frecuente, de consultas en los consultorios de los pueblos y la redución de facultativos en toda la zona de salud de Lumbrales.

Vecinos y vecinas de todas las edades han respondido masivamente a la convocatoria de la concentración, coincidiendo con las acciones de defensa de la sanidad pública que lleva a cabo la organización 'La revuelta de la España Vaciada'.

Los asistentes portaron varias pancartas en las que se leían mensajes reivindicativos como "La salud es un derecho, no un lujo", "por una Sanidad Digna en la España Vaciada", o el contundente "Nos faltan médicos" que mostraban uno grupo de niñas y niños.

El acto -"es un movimiento apolítico" quisieron dejar claro los alcaldes presentes- fue presentado por Raquel Saldaña, concejala de Sanidad de Lumbrales quien agradeció la asistencia de los vecinos y vecinas "porque hay que volver a estar aquí, hay que volver a salir a la calle, porque en los despachos no nos están escuchando, vamos a hacerlo desde la calle y todos los vecinos juntos".

Al comienzo del acto se guardó un minuto de silencio en memoria de las vícimas de la catástrofe provovada por la Dana, que se cerró con un contundente aplauso.

A continuación dos vecinas de Lumbrales leyeron el manifiesto "Yo paro por mi pueblo. Por una Sanidad integral en el medio rural" elaborado por la organización La Revuleta de la España Vaciada, y leído hoy en otros pueblos.

"Todos a una"

"Todos a una, está no será la última acción que hagamos", con esta afirmación cerraba el acto el alcalde de Lumbrales, Manuel Santos, acompañado de los alcaldes de San Felices de los Gallegos, Hinojosa de Duero, La Fregeneda, Ahigal de los Aceiteros, Bermellar, Cerralbo y Sobradillo. El resto de los alcaldes de la comarca habían justificado su asencia.

Los ayuntamientos de la comarca del Abadengo llevan meses tratando de solucionar el problema de la deficiente atención médica en la zona de salud de Lumbrales. Desde la Mancomunidad hace 3 semanas enviaron la solicitud de una reunión con el Consejero de Sanidad, sin haber obtenido respuesta hasta hoy. Las conversaciones con el gerente de atención primaria de Salamanca son ya habituales. "La gerencia siempre nos responde lo mismo, que no hay médicos, y no estamos dispuestos a que la situación continué así, pues no es normal que en Lumbrales que tiene que haber 5 médicos, haya dias que solo hay 3 o 1. Esta es una zona muy envejecida que necesita más atención médica y tenemos menos medios: es inversamente proporcional" manifiesta Manuel Santos, alcalde de Lumbrales. "Vamos a seguir reivindicando la sanidad en nuestros pueblos, no se si a través de la Revuelta de la España Vaciada o por nuestra cuenta. Los alcaldes hemos estado reunidos y todos queremos continuar juntos, pues la situación es insostenible" añade Santos.

"La gente está indignadísima, es que yá está bien, esto es 'la España abandonada', no vaciada: mira toda la gente que ahí aquí hoy. Aquí vivimos gente que pagamos lo mismo que paga una persona de Murcia, de Alicante, de Burgos" manifiesta Mariam Redero, alcaldesa de San Felices de los Gallegos.

Por su parte, Manuel Alonso, alcalde de La Fregeneda lamenta la suspensión cada vez más frecuente de las consultas en los consultorios locales, "hay semanas en las que no hay consulta médica, sólo de enfermería".

Óscar Sánchez, alcade de Ahigal de los Aceiteros pide "más médicos, y que no nos digan que va por cartillas -número de vecinos- pues en estos pueblos la población está muy envejecida y la gente mayor va con más frecuencia al médico, por eso necesitamos más médicos. Queremos que venga gente al medio rural, pero como no empecemos por la sanidad la gente no va a venir" afirma el alcalde de Ahigal.


MANIFIESTO
2 de Noviembre de 2024

Estamos asistiendo a un deterioro silencioso pero implacable de la sanidad pública, el cual se acusa más en la atención primaria, un deterioro que se ha agudizado desde la pandemia. Los recortes en la plantilla de personal sanitario (se suprimen plazas, no se cubren las bajas, no se sustituye a los sanitarios en los descansos por guardias o por vacaciones) tienen un efecto directo en la atención a la población, con la supresión de días de consulta de manera habitual en prácticamente la totalidad de los pueblos. La atención primaria, de este modo, se resiente en el tiempo y calidad de dedicación a los pacientes.

La reducción del número de profesionales de la medicina y de la enfermería añade presión a un sistema ya de por sí tensionado, lo que repercute en que se abandone en la práctica la sanidad preventiva, los programas de promoción de la salud y el bienestar personal, la aspiración a mejorar la salud comunitaria y todo tipo de campañas o actividades que conlleven una concepción de la sanidad más centrada en el cuidado de la salud que en la asistencia a la enfermedad, acorde al modelo socio-sanitario de salud pública que defendemos.

En las zonas rurales más despobladas y en los pueblos más pequeños las consecuencias de tales recortes son sangrantes. Puede suceder que el consultorio no se abra en una o varias semanas consecutivas, lo que supone a las personas mayores, con dificultades de movilidad o sin apoyos para buscar una alternativa, una barrera para el acceso a un servicio básico. Por otra parte, la precariedad en la atención de guardias, reducido al mínimo, deja a la población indefensa ante cualquier emergencia que pudiera darse. Estas situaciones, que se repiten con demasiada frecuencia, suponen un menoscabo en un derecho social que debe ser universal e igual para todos.

Detrás de todo esto, hay una causa principal: el desvío de recursos desde la sanidad pública a la sanidad privada y, sobre todo, el desmantelamiento paulatino de lo público.

Por todo ello, desde la Revuelta de la España vaciada reivindicamos una sanidad pública de calidad, dotada con recursos y personal suficiente como para atender las necesidades de la gente, dado que se trata de un servicio básico de vital importancia, para que los territorios de la España vaciada no continúen despoblándose aún más, y de un derecho social que debe garantizarse a todas las personas, independientemente del lugar donde se viva.

De manera concreta, este año la reivindicación del “Yo paro por mi pueblo” de la Revuelta de la España vaciada se centra en estas diez exigencias comunes a todos los territorios que sufren la despoblación:

Aumentar la asignación a la Atención primaria hasta alcanzar el 25% del total del presupuesto de Sanidad. Esta medida asegurará la mejora de las plantillas de personal sanitario, ofertando contratos laborables estables y de calidad.
Garantizar que los centros de salud y consultorios rurales estén
accesibles a la población y abiertos en todas las localidades.

Eliminar las listas de espera, o al menos reducirlas a cifras razonables, en la atención especializada.
Dar prioridad a las consultas presenciales, insustituibles para lograr una eficaz relación entre el paciente y el profesional, y utilizar las telefónicas exclusivamente cuando el paciente así lo decida y para temas puramente burocráticos.
Adecuar y completar las plantillas de los centros de salud, adaptándolas a las características de cada territorio de actuación y dotándolas de los especialistas necesarios en pediatría, geriatría y otras posibles especialidades.
Fomentar la sanidad preventiva y la educación para la salud, con actuaciones concretas. Por ejemplo, que los profesionales sanitarios se acerquen a los centros educativos de la zona y se haga una educación sanitaria con el fin de promover hábitos saludables.
Fortalecer y garantizar la participación y el empoderamiento de la ciudadanía a través de un correcto funcionamiento de los Consejos de salud.
Crear una especialidad en medicina rural o, al menos, habilitar un sistema de prácticas en centros de salud rurales para los profesionales que vayan a trabajar en el medio rural.
Mejorar los servicios de emergencias con la dotación de ambulancias medicalizadas, helicópteros diurnos y nocturnos u otros recursos necesarios, teniendo en cuenta las características del territorio.
Cumplir el criterio del 100/30/30 por el que abogamos; es decir, una conectividad a internet de al menos 100 megas, que los servicios básicos, estén a menos de 30 minutos de desplazamiento en coche y el acceso a una vía de alta capacidad no sobrepase los 30 minutos.Es una cuestión de justicia social.

Porque ser menos no resta derechos.

Etiquetas

Leer comentarios
  1. >SALAMANCArtv AL DÍA - Noticias de Salamanca
  2. >Las Arribes
  3. >Los vecinos del Abadengo claman por una sanidad digna en la zona de salud de Lumbrales