SS.MM. realizaron la tradicional visita a Cabeza de Framontanos y a la residencia municipal para alegrar la tarde a los mayores primero, y a los niños después con una animada cabalgata
Aunque siempre se habla de los niños como el objetivo de la llegada de los Reyes Magos, no es menos cierto que cumplida cierta edad la presencia de SS.MM. de Oriente se recibe con una gran alegría, tal vez por que afloran en la memoria aquellos recuerdos de la niñez que nunca volverán o simplemente por salir de la monotonía del día a día.
Así, tras la visita a los vecinos de la localidad aneja de Cabeza de Framontanos, Melchor, Gaspar y Baltasar se dirigieron a Villarino de los Aires para visitar a los mayores, tradicional visita a la residencia municipal y en la que estuvieron acompañados por el alcalde del municipio, Julián Martín.
Tras dejarles algunos caramelos con los que endulzar unas noches en las que la soledad se siente más que en ninguna otra, SS.MM. partieron camino a la Plaza en una animada cabalgata para repartir golosinas entre los niños, además de ilusión y, cómo no, también esperanza porque 2023 traiga lo mejor para sus vecinos.
Bajo los arcos de la Casa Consistorial aguardaban en un pequeño portal José, María y el Niño Jesús, que recibieron los tradicionales presentes, oro, incienso y mirra, de manos de los pajes, siempre fieles a los Reyes Magos en esta noche mágica y que mostraron con SS. MM. sus deseos por la unidad como objetivo común de todos sus vecinos.
Y como no podía ser de otro modo, Melchor, Gaspar y Baltasar, y todo el público asistente, pudo participar en un auténtico festín en el que no faltaba de nada: roscón, patatas meneas, chocolate, empanada, refrescos y hasta castañas Asadina, puesto este animado por los sones de la gaita y el tamboril de Carlos de Haro.