Me gustaría si tiene ganas, lo juzga de interés o le apetece que un técnico de tráfico, no tiene por qué ser ingeniero, se acercara a mirar detenidamente esta calle y estudiara cómo se diseñó en su día para la circulación. Es un vía muy céntrica, la del Padre Astete, a la trasera de los Salesianos, entre la avenida de Portugal y padre Cámara (va de padres el asunto). Pues verán, que no deseo en modo alguno perderme en inútiles disquisiciones.
Si contamos los vehículos que pueden aparcar en el lugar indicado por las rayas verdes de la ORA y los que podrían aposentarse en el otro, libre de obstáculos y garajes, la d
iferencia es notoria, ocho más en el lado contrario al permitido, una cifra nada despreciable con la escasez de aparcamientos que padecemos. Y esto es tan simple como borrar las líneas marcadas a la izquierda de la fotografía y pintarlas a la derecha, nada costoso y que podría ser (tal vez obligado) asumido por la empresa adjudicataria de los aparcamiento de pago.
Y dirán que anda uno siempre preocupado de simplezas, fotografiando tontunas, estoy de acuerdo; pero son mil casos, mil estorbos, mil cosas mal hechas que si le diéramos un solución sencilla, como la que aquí proponemos, empezaríamos a pensar que en verdad alguien se preocupa de esta ciudad.