La Asociación Plaza Mayor celebra en Salamanca una jornada pionera para abordar el protocolo de actuación ante agresiones sexuales. Detallan el funcionamiento del servicio 'ATIENDO' y la hoja de ruta médica y legal según la temporalidad del suceso.
La Asociación de Ayuda a la Mujer “Plaza Mayor” ha organizado en Salamanca la 1ª Jornada sobre "Violencia Sexual: reconocer, actuar y prevenir", un evento pionero destinado a la sensibilización y educación sobre las agresiones sexuales. La inauguración ha contado con la presencia de la subdelegada del Gobierno, Rosa López, y la Directora General de la Mujer de la Junta de Castilla y León, María Victoria Moreno Saugar, subrayando la importancia institucional de abordar esta lacra social.
En el marco de este encuentro, la presidenta de la asociación, Ascensión Iglesias Redondo, ha detallado el funcionamiento del Centro de Crisis de atención a Víctimas de Agresiones Sexuales "ATIENDO", un servicio gestionado por la entidad y dependiente de la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León. Este recurso, que opera 24 horas al día, se ha consolidado como un pilar fundamental para la asistencia inmediata a las víctimas en toda la comunidad autónoma.
El impacto del servicio se refleja en sus cifras. "A lo largo de lo que va de año, hemos atendido a 98 mujeres", ha revelado Iglesias. Inmediatamente después, ha matizado el alcance del dato, explicando que el servicio trasciende las fronteras provinciales. "Entender que cuando digo 98 mujeres, no son 98 mujeres de Salamanca, sino que el servicio de ATIENDO (...) podemos atender a gente de León, por ejemplo, de Burgos o de cualquier provincia de nuestra comunidad".
El centro "ATIENDO" no es solo una línea telefónica, sino un sistema de respuesta integral que ofrece un primer contacto seguro y anónimo para las víctimas. A través de una llamada o un chat, las mujeres pueden relatar su situación y recibir orientación inmediata. El objetivo es claro: proporcionar una hoja de ruta en un momento de máxima vulnerabilidad.
"Lo que hacemos es decirle qué tienen que hacer, dónde tienen que acudir y cómo deben de hacerlo", ha explicado la presidenta de Plaza Mayor. Se trata de un canal donde las víctimas "pueden exponer lo que les ha pasado y que indiscutiblemente en el acto se le contesta diciendo qué tienen que hacer, cómo deben de hacerlo y qué servicios tienen a su entera disposición de forma gratuita". La inmediatez y la gratuidad son, por tanto, dos de las características esenciales del programa.
Uno de los puntos clave abordados durante la jornada ha sido el protocolo a seguir tras sufrir una agresión sexual. Ascensión Iglesias ha insistido en que "no son todos los casos iguales y cada situación requiere un protocolo". La temporalidad del suceso es un factor determinante en los primeros pasos a seguir.
Si la agresión es reciente, la recomendación es inequívoca. "Lo primero que le decimos es que tienen que acudir a un centro médico a que le examinen", ha señalado. Sin embargo, si ha transcurrido más tiempo, como en casos de mujeres que llaman semanas después, el enfoque cambia. "Hay muchas mujeres que llaman y a lo mejor su agresión ha ocurrido hace 15 días, cuyo caso evidentemente no le vamos a decir que acudan a los servicios médicos".
En cualquier escenario, la derivación a los equipos especializados es inmediata. "Lo que le hacemos es derivar inmediatamente a las psicólogas y a las abogadas, que son las que se van a encargar directamente de ella en todo momento", ha afirmado Iglesias. El servicio se coordina con los recursos de cada provincia para asegurar una atención de proximidad, ya sea en León, Burgos o Salamanca, donde se les invita a acudir directamente al centro de la asociación para una primera atención de urgencia antes de asignarles los profesionales correspondientes.
Más allá de la atención directa, la asociación ha asumido un rol proactivo en la prevención y la educación. Esta primera jornada nace precisamente de esa necesidad. "Junto con la atención directa a las víctimas de agresiones sexuales, tenemos que hacer sensibilización y educación en la agresión", ha destacado Iglesias. El objetivo es arrojar luz sobre un concepto a menudo malinterpretado.
La finalidad del encuentro es, en sus propias palabras, "educar y para que se sepa qué son las agresiones sexuales y qué hay que hacer ante un agresor". Se trata de un esfuerzo por definir los límites, aclarar qué es y qué no es una agresión, y empoderar a la sociedad con herramientas para reconocerla, actuar y, en última instancia, prevenirla.
Fotos de David Sañudo