Las obras en el Cerro de San Vicente de Salamanca han sacado a la luz los restos de la iglesia del antiguo convento benedictino y la estructura de un posible pozo de nieve de grandes dimensiones. El alcalde, Carlos García Carbayo, ha anunciado que los hallazgos modificarán el proyecto de reapertura del Portillo para integrar los vestigios.
Las obras de acondicionamiento que se están ejecutando en el Cerro de San Vicente han sacado a la luz nuevos e importantes hallazgos arqueológicos. Se trata de la estructura de un posible pozo de nieve y los cimientos de la iglesia del desaparecido convento benedictino, según ha anunciado este jueves el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo.
El regidor salmantino, acompañado por el concejal de Fomento, Fernando Carabias, ha visitado la zona para informar sobre estos descubrimientos. Los restos han aparecido en el marco de las actuaciones para la reapertura del Portillo de San Vicente y el acondicionamiento de la plataforma superior del cerro.
García Carbayo ha destacado que este yacimiento, “la zona cero del origen de la ciudad en la primera Edad del Hierro y el lugar donde empezó todo”, es un enclave que “no deja de deparar sorpresas gracias al formidable trabajo de los arqueólogos”.
Durante los trabajos para reabrir el conocido como Portillo de San Vicente en la muralla medieval, los arqueólogos localizaron los cimientos del testero plano de la capilla mayor de la iglesia del antiguo convento benedictino, así como parte de las capillas laterales.
Este hallazgo ha obligado a modificar el proyecto original para poder integrar los restos y que queden a la vista de los visitantes. “Esta circunstancia ha obligado a renunciar a la accesibilidad inicialmente concebida en esta entrada ya que se ha tenido que optar por una escalera desde la que se podrán ver estos elementos del desaparecido complejo monástico”, ha explicado el alcalde.
Paralelamente, en los trabajos de acondicionamiento de la plataforma superior del cerro, que se desarrollan desde el pasado verano, se ha producido otra “muy grata sorpresa”. Ha aparecido lo que podría ser un pozo de nieve vinculado al convento, cuya embocadura ya se había detectado en 2017 sin que se hubiera profundizado en su investigación.
De momento, la excavación ha alcanzado unos cuatro metros de profundidad sin llegar a la base, lo que sugiere “una estructura de grandes dimensiones”, según ha detallado el primer edil. No obstante, será necesario concluir la excavación para confirmar su función original como 'frigorífico de piedra', una estructura común en los grandes complejos monásticos de la ciudad como los de San Andrés, San Esteban o la Clerecía.
Ambos proyectos cuentan con una inversión total que supera los 1,6 millones de euros, financiados por los Fondos Europeos ‘Next Generation’. La reapertura del Portillo de San Vicente tiene un presupuesto de 587.294,48 euros, mientras que el acondicionamiento de la plataforma superior asciende a 1.011.930,66 euros.
Estos nuevos hallazgos pasarán a enriquecer la visita al Cerro de San Vicente, cuyo museo, inaugurado el pasado mes de mayo, ya ha recibido 4.714 visitas. Además, García Carbayo ha anunciado una actuación de accesibilidad en la calle Joaquín Zahonero, donde se instalarán barandillas para mejorar el acceso al cerro.
Fotos y vídeo de David Sañudo