A través de un recorrido cronológico por sus 41 años de carrera, el artista narra su vida canción a canción, desde himnos como 'Lobo hombre en París' hasta su etapa en solitario, definiendo su trayectoria como 'sexo, drogas y rock and roll'. En esta enmtrevista nos cuenta más destalles
El Teatro Liceo se prepara para recibir el espectáculo 'Biografía', un viaje musical y personal a través de la trayectoria de Rafa Sánchez. El icónico vocalista de La Unión narra su vida canción a canción, conectando sus grandes éxitos con los momentos históricos que los rodearon y una filosofía que él mismo resume en tres conceptos. El concierto será este viernes, 31 de octubre a las 21:00h. Las entradas para este concierto tienen un precio de 28, 30, 35 y 38 euros y se pueden adquirir en la taquilla del Liceo o en www.ciudaddecultura.org .
Con una carrera que abarca más de cuatro décadas y catorce números uno, el artista ha decidido poner en orden sus recuerdos para ofrecer un formato íntimo y narrativo y que explica en una entrevista a SALAMANCArtv AL DÍA. "Iré cantando canciones de La Unión y también de mi etapa en solitario por orden cronológico, en el cual os contaré cómo ha ido cambiando mi vida canción a canción", explica el propio Sánchez.
El resumen de esta larga trayectoria es, para el cantante, claro y directo: "sexo, drogas y rock and roll". Sin embargo, el relato va más allá, tejiendo conexiones entre su biografía y eventos que marcaron a toda una generación. "Hay alguna relación con el tiempo, con eventos que han pasado, han sido importantes, no solo en mi vida, sino a nivel mundial, como la caída del Muro de Berlín", detalla el artista.
La creación de 'Biografía' ha supuesto para Sánchez un ejercicio de introspección. "Significó sobre todo en un principio poner orden a mis recuerdos, porque tenía pues un pequeño batiburrillo de cuándo pasó esto, cuándo pasó lo otro", confiesa. Este proceso le ha permitido analizar "los fallos y los aciertos que has ido teniendo a lo largo de una larga carrera, de 41 años".
Canciones como 'Sildavia', 'Ella es un volcán' o 'Más y más' forman parte del imaginario colectivo de varias generaciones. Rafa Sánchez vive esta perdurabilidad con agradecimiento. "Lo vivo con mucha alegría y mucha gratitud porque gracias a esas canciones, puedo seguir subiéndome encima del escenario", afirma. El cantante considera que estos temas son los que hacen el concierto "muy vibrante y muy energético".
En su análisis, destaca un factor clave para esta longevidad: "Tuvimos la suerte de hacer todo 14 números 1 antes de que aparecieran las televisiones privadas, o sea que estaban la 1 y la 2 y te veía todo el país". Esta exposición masiva, hoy impensable, consolidó un repertorio que sigue siendo el pilar de sus directos. "Canciones como 'Lobo hombre en París', 'Sildavia', 'Ella es un volcán', 'Más y más', 'Fueron los celos' o 'Vuelve el amor'... ese agradecimiento a esas canciones es lo que me permite seguir", precisa.
A pesar de las décadas y las innumerables actuaciones, la pasión por el directo sigue intacta. Para Rafa Sánchez, el escenario es un espacio casi sagrado. "Es de los mejores sitios donde puedes estar, porque puedes expresar tus sensaciones, tus sentimientos y además contactar con un montón de gente que no conoces", asegura. La adrenalina, lejos de atenuarse, sigue siendo el motor principal.
"Incluso sigo teniendo ese mariposeo en el estómago, esa última meada antes de salir al escenario", revela con sinceridad. Y sentencia con rotundidad: "Creo que el día que no sienta eso, será un buen día para dejarlo. Me encanta subirme al escenario".

Si hay una canción que define la carrera de La Unión, es sin duda 'Lobo hombre en París'. Un tema que ha trascendido al propio grupo, convirtiéndose en un himno inmortal. Sánchez es plenamente consciente de este fenómeno. "Cuando tú a un veinteañero le preguntas si conoce La Unión, muchos de ellos te dicen que no. Pero tú les dices, ¿conoces Lobo hombre en París? Y todos te dicen que sí", relata.
Esta anécdota ilustra su conclusión: "es una canción que se ha hecho más grande que el grupo que la compuso". Por ello, aunque reconoce disfrutar de la novedad de sus temas más recientes, su lugar en el panteón es indiscutible. "Aunque de repente disfrute hoy en día cantando canciones de mi etapa en solitario, disfrute más por la novedad, pero obviamente, 'Lobo hombre en París' es la canción", subraya.
Ante su inminente actuación en el Teatro Liceo, el artista no pide nada al público salmantino, sino que se centra en lo que él puede ofrecer. "Realmente, al público no le pido nada. Todo lo contrario, lo que intento es que lo que les ofrezca les guste", comenta. Su aspiración va más allá del entretenimiento: "Espero que no solo les divierta, sino que también puedan comprender cómo muchos de los pasos que se han ido dando tienen un porqué".
La acogida del espectáculo en otras ciudades le sirve de aval. "Cuando salgo y viene gente al camerino, lo definen como un espectáculo muy muy cercano y muy elegante, o sea, que con que tengan una pequeña apreciación de eso, yo me doy por pagado", confiesa. Rafa Sánchez recuerda con afecto sus anteriores visitas a la ciudad, a la que califica como "una joya, es preciosa". Aunque no ha actuado en ella en muchas ocasiones, guarda un gran recuerdo de su patrimonio. "Es una ciudad que tiene mucho pozo, mucha historia y mucha arquitectura que me encanta", concluye, antes de añadir un nuevo capítulo musical a la historia de Salamanca.