La Junta de Castilla y León recomienda a los grupos de riesgo y personas sensibles reducir las actividades enérgicas al aire libre y seguir sus pautas de medicación.
La Junta de Castilla y León, a través de su Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, ha emitido una serie de recomendaciones ante la previsión de altas concentraciones de polvo en suspensión procedente del norte de África. El episodio comenzará este domingo, 12 de octubre, y se espera que afecte a todo el territorio de la comunidad durante varios días, provocando una calidad del aire calificada como "muy desfavorable".
Según los modelos de predicción, esta intrusión de partículas es un proceso absolutamente natural sobre el que no cabe intervención humana. La alerta se basa en la previsión de que los niveles de partículas PM10 (aquellas con un tamaño inferior a 10 micras) superen el valor de 50 microgramos por metro cúbico (μg/m3) como media móvil de 24 horas.
Aunque la normativa española y europea no establece un umbral de información a la población para este contaminante específico, la Consejería ha decidido lanzar una serie de consejos para minimizar la afección a la salud de los ciudadanos. Las medidas se centran especialmente en los colectivos más vulnerables.