La ceremonia, presidida por la subdelegada del Gobierno y el comisario jefe, incluyó la imposición de condecoraciones de la Orden al Mérito Policial y un emotivo homenaje a los agentes fallecidos en acto de servicio.
Salamanca ha acogido este jueves, 2 de octubre, los actos centrales con motivo de la festividad de la Policía Nacional. La emblemática Plaza de Anaya ha sido el escenario de una solemne ceremonia institucional que ha servido para reconocer la labor de los agentes y recordar a los caídos.
El evento principal se desarrollaba en la Plaza de Anaya. La ceremonia, de carácter institucional, estuvo centrada en la imposición de condecoraciones a los miembros del cuerpo y a personas ajenas a la institución que han destacado por su colaboración y méritos.
Uno de los momentos más significativos de la jornada ha sido la entrega de distinciones correspondientes a la Orden al Mérito Policial. Con ellas, se ha premiado a diferentes personas por sus actuaciones destacadas y su dedicación, reconociendo así su contribución a la seguridad y el servicio público.
La ceremonia también ha contado con un espacio para el recuerdo y el tributo. Se ha llevado a cabo un solemne homenaje a los Policías Nacionales fallecidos en acto de servicio, un momento de gran emotividad para todos los presentes y para la familia del cuerpo policial.
El acto ha estado presidido por la subdelegada del Gobierno en Salamanca, Rosa María López Alonso, y el Comisario Jefe Provincial de Salamanca, Claudio Javier Díaz Serrano.
Junto a ellos, han asistido otras destacadas autoridades de la vida política y social de la provincia, como el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, y el presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, mostrando así el respaldo institucional a la labor de la Policía Nacional.
La jornada conmemorativa dio comienzo horas antes, a las 10:30 horas, con una celebración religiosa en la Iglesia de los Padres Dominicos, ubicada en la Plaza Concilio de Trento, que sirvió como preludio a los actos centrales desarrollados posteriormente en la Plaza de Anaya.
Fotos de David Sañudo