La iniciativa busca acercar la tradición al público en un formato fresco y participativo, con actuaciones espontáneas que invitaron a los asistentes a bailar
La Plaza Mayor de Salamanca ha sido el escenario, durante la mañana y el mediodía de este domingo, de una vibrante Sesión Vermut, una de las grandes novedades de la edición de este año del Festival Internacional de Folclore.
Esta propuesta ha nacido con el objetivo de acercar el folclore al público en un formato más fresco, cercano e informal. La iniciativa ha transformado el corazón de la ciudad en un punto de encuentro a plena luz del día, buscando conectar la tradición directamente con la vida de la calle.
Para ello, los grupos participantes han ofrecido actuaciones espontáneas, invitando a que el público no fuera un mero espectador. De este modo, los asistentes han podido integrarse, bailar y compartir la fiesta en un ambiente distendido, cumpliendo el propósito de hacer de la cultura popular una experiencia compartida y vivida en el centro neurálgico de Salamanca.
VÍDEO Y FOTOS: DAVID SAÑUDO