Llegaba al fin de semana con una renta más que jugosa para sentenciar el título ante su único perseguidor matemático
El piloto español Alex Palou alargó su hegemonía en la Indycar estadounidense al certificar su tercer campeonato consecutivo y cuarto en los últimos cinco años, después de terminar con las cuentas con un tercer puesto en el Gran Premio de Portland.
Palou llegaba al fin de semana con una renta más que jugosa para sentenciar el título ante su único perseguidor matemático Pato O'Ward (Arrow McLaren), y unos problemas eléctricos del mexicano, cuando había arrancado primero en la carrera, pusieron en bandeja otra Indycar para el español.