Salamanca se asfixia bajo la ola de calor: temperaturas extremas, alerta sanitaria y varias muertes registradas
Con máximas que han alcanzado este martes los 38ºC en la capital y hasta 41ºC en municipios del oeste como Villarino de los Aires
La segunda ola de calor del verano ha sumido a Salamanca y a buena parte de su provincia en un episodio de temperaturas extremas, con máximas que han alcanzado este martes los 38ºC en la capital y hasta 41ºC en municipios del oeste como Villarino de los Aires. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) mantiene activado el aviso naranja por temperaturas extremas, mientras que Sanidad ha declarado la alerta roja sanitaria, el nivel más alto de riesgo.
Este episodio cálido, que comenzó a intensificarse el pasado sábado, podría prolongarse al menos hasta el domingo 10 de agosto, con posibilidad de extenderse algunos días más, según los últimos modelos meteorológicos. La persistencia de mínimas nocturnas superiores a los 21?°C impide un descanso adecuado, lo que agrava los efectos del calor en la salud de la población más vulnerable.
Ocho muertes en Salamanca durante la primera ola
La primera ola de calor, registrada entre el 28 de junio y el 5 de julio, ya dejó un trágico balance de ocho fallecidos en la provincia, según datos del Instituto de Salud Carlos III. Expertos en salud pública advierten que este segundo episodio, aún más prolongado y con mayor intensidad nocturna, podría superar esas cifras si no se extreman las precauciones.
A nivel nacional, el número de muertes atribuibles al calor en lo que va de verano supera las 1.500 víctimas, un 42?% más que en el mismo periodo del año anterior. Solo en julio se contabilizaron 1.060 fallecimientos por causas directamente relacionadas con las altas temperaturas.
Municipios en máxima alerta
Más de 900 municipios españoles, incluidos la práctica totalidad de la provincia de Salamanca, se encuentran actualmente en nivel máximo de riesgo térmico para la salud, según el sistema de vigilancia del Ministerio de Sanidad. Esta clasificación tiene en cuenta factores como la temperatura media, la humedad relativa y la persistencia del calor extremo durante varios días consecutivos.
Entre los efectos más comunes del calor severo se encuentran los golpes de calor, la deshidratación, los mareos, las taquicardias y, en casos graves, fallos multiorgánicos. Los colectivos más vulnerables incluyen a mayores de 65 años, bebés, personas con enfermedades crónicas y trabajadores al aire libre.
