El Ayuntamiento de Salamanca ha finalizado la urbanización en el entorno de la calle Gladiolos, en el barrio de Garrido, con una inversión de 497.000 euros. Esta actuación, cofinanciada con fondos Next Generation, permite ahora a las comunidades de vecinos instalar ascensores ocupando parte de la vía pública
El barrio Garrido ha completado un paso fundamental en su transformación hacia una mayor accesibilidad. El Ayuntamiento de Salamanca ha finalizado la primera fase de las obras de urbanización en el entorno de la calle Gladiolos y otras tres vías adyacentes, una actuación clave que ahora permite a las comunidades de vecinos iniciar la instalación de ascensores exteriores.
El concejal de Fomento, Fernando Carabias, ha visitado la zona que ha contado con una inversión de 497.000 euros, cofinanciada con fondos europeos Next Generation. El proyecto responde a una demanda histórica de los residentes en edificios antiguos que carecen de espacio interior para elevadores.
El plan municipal se ha estructurado en dos fases. La primera, ya ejecutada por el consistorio, se ha centrado en adecuar el espacio público. "Las intervenciones han consistido en hacer plataforma única con el fin de asegurar y garantizar la accesibilidad en general a las personas, pero en particular a las personas de movilidad reducida", ha explicado Carabias.
Esta modernización ha incluido la renovación integral de las vías con la bajada de balcones, nuevas barandillas, parterres ajardinados y una mejora sustancial del alumbrado público, ahora más potente y eficiente. Con la calle preparada, el testigo pasa ahora a los vecinos para acometer la segunda fase: las obras privadas para ampliar los portales e instalar los ascensores.
La principal barrera técnica en estos inmuebles era la falta de hueco para un ascensor, lo que obligaba a ocupar parte de la acera. Esta solución, ya probada en barrios como Chinchibarra, planteaba un conflicto entre accesibilidad y aparcamiento. El concejal ha sido tajante al respecto: "Había que elegir ascensores en las aceras o aparcamiento. La duda no existe, la elección está clara, ascensores, accesibilidad para los vecinos".
Para compensar la supresión de plazas de estacionamiento, el Ayuntamiento ha habilitado nuevos aparcamientos en el cercano Paseo de los Robles mediante una reorganización del tráfico y la redistribución de las zonas existentes.
Consciente del coste que supone la instalación de un ascensor para las economías familiares, el consistorio ha habilitado una línea de ayudas dentro del programa de Entornos Residenciales de Rehabilitación Programada (ERRP). Fernando Carabias ha recordado la importancia de cumplir los plazos: "Las comunidades que van a acometer este tipo de obras tienen de plazo hasta el 30 de noviembre para solicitar las ayudas correspondientes".
Esta actuación en Garrido no es un caso aislado, sino parte de una estrategia municipal que se replicará en otras zonas de la ciudad para mejorar la calidad de vida. "Demostramos con hechos, no solo con palabras, nuestro compromiso con los ciudadanos", ha afirmado el concejal.
Carabias ha anunciado que próximamente comenzarán obras similares en los siguientes barrios, Barrio del Carmen, en las conocidas como 'casas de Nica', Ciudad Jardín y Chinchibarra, en su segunda fase.
Estas zonas se suman a otras donde ya se han ejecutado o se están ejecutando mejoras, como El Zurguén, Pizarrales, San Bernardo y Prosperidad. Paralelamente, avanzan otras obras como las del Paseo del Gran Capitán, enmarcadas en el proyecto Life Vía de la Plata, que renovará calzada, aceras y redes de saneamiento.