En el conjunto del país, el paro baja en 1.357 personas, alcanzando la cifra más baja para un mes de julio en 18 años; aemás, el paro juvenil marca un nuevo mínimo histórico.
Los datos del paro correspondientes al mes de julio ofrecen una doble lectura en la provincia de Salamanca. Según las cifras oficiales publicadas este lunes por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), el desempleo experimentó un ligero repunte mensual con 65 parados más que en junio (+0,42%), situando el número total de personas sin empleo en 15.617.
Sin embargo, esta subida puntual contrasta con la sólida tendencia a la baja en la comparativa interanual. Respecto a julio de 2024, Salamanca cuenta con 1.183 desempleados menos, lo que representa un significativo descenso del 7,04%, confirmando una mejora estructural del mercado de trabajo en el último año.
El análisis detallado de los datos revela dos realidades contrapuestas. Por un lado, el incremento de 65 personas en las listas del paro rompe la tendencia de descenso de los meses anteriores y se alinea con el comportamiento habitual del mercado laboral en julio, un mes donde a menudo finalizan contratos ligados a la campaña de primavera y al sector servicios.
Por otro lado, la perspectiva a largo plazo es claramente positiva. La reducción de casi 1.200 parados en los últimos doce meses es el dato más relevante para analizar la salud del mercado laboral salmantino, mostrando una consolidación en la recuperación del empleo que va más allá de las fluctuaciones estacionales.
El ligero aumento del paro en Salamanca no es un hecho aislado dentro de la comunidad. La provincia sigue la misma línea que el conjunto de Castilla y León, que figura entre las once comunidades autónomas donde el desempleo ha crecido en julio, encabezadas por Cataluña (+4.339) y el País Vasco (+1.600).
Esta situación regional y provincial contrasta con el dato global de España. En el conjunto del país, el paro bajó en 1.357 personas, alcanzando la cifra más baja para un mes de julio en 18 años y situando el total de desempleados en 2.404.606 personas. Además, el paro juvenil a nivel nacional marcó un nuevo mínimo histórico.
Para contextualizar la situación local, es importante destacar los principales hitos del mercado laboral en España durante el pasado mes:
El PSOE de Salamanca, a través de su secretaria de empleo, Irene Fernández, ha calificado como “positivos” los datos laborales del mes de julio, atribuyendo los resultados a “las políticas del Gobierno” de Pedro Sánchez. A pesar de un ligero aumento de 65 nuevos demandantes de empleo, los socialistas ponen el foco en el incremento de 168 cotizaciones a la Seguridad Social, que alcanza un “récord histórico” con 132.133 afiliados. Además, Fernández ha subrayado que la provincia cuenta con cerca de 1.200 parados menos que hace un año, lo que, a su juicio, demuestra la eficacia de las medidas del ejecutivo central.
La portavoz socialista ha contextualizado el aumento del paro, explicando que julio es un mes estacionalmente complejo, pero que el incremento de este año es notablemente inferior al registrado en el mismo mes de 2024, cuando el desempleo creció en 293 personas. En este sentido, Fernández ha criticado duramente la actitud de los dirigentes del Partido Popular, afirmando que tanto el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, como el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, “siguen con los brazos cruzados mirando para otro lado” frente a un modelo socialista que, según defiende, es “más social, más justo y sostenible”.
Por su parte, desde CEOE - CEPYME, ha valorado con "prudencia" la subida del paro en julio, con 65 desempleados más (0,4%) que sitúan el total en 15.617 personas. Aunque la cifra interanual refleja un descenso del 7%, la patronal insiste en la necesidad de proteger al tejido empresarial para frenar la "desaceleración en la creación de empleo".
La confederación de empresarios considera "imprescindible" evitar la proliferación de cambios normativos a nivel nacional, ya que generan "incertidumbre, rigidez y un incremento de los costes operativos". Critican especialmente la aprobación de medidas como la ampliación del permiso parental "sin el debido diálogo con los interlocutores sociales", lo que a su juicio margina la concertación.
Según la patronal, esta forma de legislar se suma a una "elevada presión" que ya soportan las empresas, entre la que destacan:
- Una tasa de absentismo "sin precedentes".
- Una caída de la productividad por ocupado.
- La propuesta de reducción de jornada a 37,5 horas.
- Una elevada fiscalidad y el aumento de la burocracia.