Con motivo de la Semana Mundial, los expertos del CAUSA, Poli Poyo y Javier Sánchez Conde, analizan los avances, retos y el robusto sistema de apoyo del hospital, que logra que el 75% de las madres salgan amamantando
Con motivo de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra del 1 al 7 de agosto, el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA) se posiciona como un referente en el fomento y apoyo a esta práctica. Los datos hablan por sí solos: mientras la media nacional de lactancia materna exclusiva a los seis meses se situaba en un 47% en 2023, un estudio previo en Salamanca la cifraba en un impresionante 70%.
Para entender las claves de este modelo, hablamos con Poli Poyo Poyo, responsable de la implantación de la Guía de buenas prácticas en Lactancia Materna BPSO en el CAUSA, y con Javier Sánchez Conde, matrón y presidente del comité de área de lactancia materna. Ambos desgranan los logros, los desafíos pendientes y las actividades previstas para concienciar sobre una práctica con beneficios incalculables para la madre, el bebé y la sociedad.
El lema de este año es “Priorizar la lactancia materna: crear sistemas de apoyo sostenibles”. Según explican los expertos, el objetivo es tejer una red sólida que acompañe a las familias en un proceso único y, a veces, complejo.
“Desde el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca estamos trabajando mediante la implantación de guías de buenas prácticas clínicas de la RNAO fomentando y apoyando el inicio, la exclusividad y la continuación de la lactancia materna”, afirman. Este enfoque se materializa en una consulta de seguimiento especializada y en un esfuerzo constante por parte de todos los profesionales para “proteger y fomentar la lactancia materna”.
Aunque la semana oficial es en agosto, el CAUSA ha diseñado un programa de eventos extendido para maximizar su impacto, evitando el periodo vacacional. Las actividades programadas puedes consultarlas en este enlace.

Los datos del CAUSA reflejan la eficacia de sus protocolos. Un 75% de las madres reciben el alta hospitalaria manteniendo la lactancia materna, una cifra similar a la media nacional. Sin embargo, los indicadores de calidad asistencial marcan la diferencia: el contacto piel con piel inmediato tras el nacimiento se realiza en más del 95% de los casos, y un 80% de los recién nacidos logran un agarre eficaz al pecho en su primera hora de vida.
“Aunque no disponemos de las tasas de lactancia actuales a los 6 meses, en un estudio de investigación mediante encuestas telefónicas realizado hace unos años en el Hospital de Salamanca se situaban en el 70 %, muy por encima del 39% de media nacional del año 2017 y del 47% del año 2023”, subrayan los especialistas.
Los expertos recuerdan que los beneficios de la lactancia son enormes y están científicamente probados, impactando en la salud del bebé, la madre y en la sostenibilidad del planeta.
El bloque obstétrico del CAUSA cuenta con un equipo multidisciplinar formado y sensibilizado. Su labor va más allá de la asistencia estándar, facilitando el contacto piel con piel inmediato, enseñando técnicas de agarre y promoviendo la lactancia a demanda. Un ejemplo destacado es el protocolo de cesáreas:
“La paciente tiene la posibilidad de estar acompañada dentro del quirófano por su pareja favoreciendo el vínculo familiar, la relación de apego temprano y el contacto piel con piel inmediato del recién nacido en el mismo quirófano”, explican. Además, las camas de recuperación post anestésica en el paritorio permiten que madre, bebé y acompañante permanezcan juntos en todo momento hasta subir a la habitación.
A pesar de los avances, las dificultades persisten. Al inicio, los problemas suelen ser “técnicos”, como el agarre o la posición. No obstante, los expertos destacan que barreras del pasado, como la separación de madre e hijo, han sido superadas. El gran escollo para mantener la lactancia a largo plazo es otro: “el obstáculo más grande quizás sea la incorporación al trabajo. En la actualidad, las leyes y permisos actuales no protegen la lactancia materna lo suficiente”.
La desinformación es uno de los mayores enemigos. Mitos como “tengo poca leche” o “mi leche no alimenta” generan inseguridad. Los profesionales lo tienen claro: “La realidad es que la gran mayoría de las mujeres producen la leche suficiente si existe un estímulo adecuado y los bebés lloran por múltiples motivos”.
El éxito de la lactancia no depende solo de la madre. “Las parejas son la fuente de apoyo más importante que influyen en la toma de decisiones sobre el inicio y continuación de la lactancia”, explican. El consejo para ellos es claro: “involucrarse, acudir juntos a charlas o talleres, y acompañar a la madre de forma activa y respetuosa”.
El compromiso del CAUSA es continuo. Actualmente, el hospital está inmerso en dos proyectos clave para consolidar su modelo. Por un lado, la implantación de la guía BPSO (Best Practice Spotlight Organization) de la RNAO canadiense. Por otro, trabajan para conseguir la acreditación de la fase 2 de la IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia). “Ambos proyectos tienen recomendaciones comunes y sus prácticas buscan conseguir mejores resultados de lactancia”, concluyen.