“Ahora me toca seguir disfrutando de este equipo y de este Club, desde la grada, más cerca de vosotros. Formándome. Y, sobre todo, junto a mi familia.”
Con la temporada 2024-2025 ya cerrada y las emociones aún frescas tras la derrota en la final del play-off de ascenso a Segunda División, Óscar González ha anunciado su marcha como entrenador del Piensos Durán Albense. Lo ha hecho a través de una emotiva carta publicada este domingo, en la que confirma que la decisión ya estaba tomada con anterioridad: “Hace una semana besaba la pista del Pabellón Municipal de Alba de Tormes al finalizar el partido”, escribe, dejando claro que este adiós no tiene que ver con el resultado deportivo.
Óscar ha sido el entrenador del primer equipo durante siete temporadas, desde que asumiera el cargo en el verano de 2018 justo después de colgar las zapatillas. Aquel 16 de julio de hace casi siete años, escribía con ilusión: “No tengo el título que acredita entrenar en 2ªB, aunque estudiaré y trabajaré para ello durante la temporada. Pero, ¿acaso hay alguna frontera para la ilusión y la responsabilidad?”. Hoy, su recorrido es la mejor respuesta a esa pregunta.
Durante su etapa al frente del banquillo, el club ha vivido algunos de los mejores momentos de su historia reciente: dos clasificaciones consecutivas para los play-off, victorias inolvidables, un crecimiento sostenido del equipo y una afición cada vez más cercana e implicada. “He sido un privilegiado de sentir los colores del Club y el equipo en el que he crecido y me he educado. He unido muchas veces este sentir con goles, corazones, trabajo, compañerismo.”
En su carta, también subraya el valor humano de esta etapa. “Me voy con un orgullo tremendo de ver cómo este escudo ha influenciado positivamente en la vida de muchos jugadores que han sufrido y que han encontrado aquí una vía de crecimiento.” El ya exentrenador ha querido tener palabras de agradecimiento para su plantilla, el cuerpo técnico, amigos, familia y, por supuesto, la afición. “Gracias a la afición, la más humilde, la más generosa y la más comprometida que he visto en tantos años. Qué orgullo ir juntos por media España con este escudo en el pecho.”
Óscar se marcha por decisión personal: “El cargador del deporte se me ha ido diluyendo y necesito reconectar con la persona que tiene ilusión, liderazgo, confianza y apoyo.” Y concluye con un mensaje que resume toda su trayectoria: “Un pueblo, un Club, una Afición.”
Su historia con el Piensos Durán Albense no termina aquí. Cambia de lugar, de rol. Pero sigue latiendo al ritmo de una pasión compartida que ha dejado una huella imborrable en Alba de Tormes.
Porque no se necesita estar en la pista para seguir siendo parte del equipo.
