Los buitres matan una vaca y su ternero en un nuevo ataque en Villasdardo
La explotación afectada acumula ya 27 bajas (14 vacas y 13 terneros) por estos hechos, mientras los ganaderos reclaman acción a las administraciones ante la creciente frecuencia de los ataques y la falta de respuesta.
El campo salmantino vuelve a ser testigo de la crudeza de los ataques de la fauna salvaje al ganado. En esta ocasión, el municipio de Villasdardo ha sido el escenario donde una explotación ganadera ha visto cómo una vaca y su ternero perdían la vida, presuntamente, a manos de los buitres.
La Asociación de Ganaderos 19 de Abril ha dado la voz de alarma ante este nuevo episodio, que se suma a un preocupante historial de incidentes similares en la misma explotación. Según informa la asociación, este no es un hecho aislado para los afectados.
La explotación ganadera de Villasdardo ya había sufrido múltiples ataques hace dos y tres años, lo que se tradujo en importantes pérdidas económicas y un duro golpe para sus propietarios. Con este último suceso, la cifra de animales muertos en esta explotación a causa de los buitres asciende a 14 vacas y 13 terneros.
Desde la asociación destacan que "solo en una ocasión, un ternero pudo ser salvado y criado a biberón", una anécdota que subraya la virulencia y el impacto constante que estos ataques suponen para algunas explotaciones ganaderas de la provincia.
Mientras tanto, los ganaderos continúan asumiendo íntegramente la carga económica derivada de estas muertes. La Asociación de Ganaderos 19 de Abril lamenta que "nadie responde, ni asume responsabilidades a este grave problema", enfatizando que el daño no es solo monetario, sino también "emocional y productivo".
Urgencia de medidas efectivas
Lejos de considerarse hechos aislados, la asociación advierte que "este tipo de sucesos se están volviendo cada vez más frecuentes". Por ello, consideran "imprescindible una respuesta urgente y eficaz por parte de las autoridades competentes".
En su comunicado, la Asociación de Ganaderos 19 de Abril insiste en que las administraciones "no pueden ni deben ignorar estas situaciones" que generan una gran desazón e impotencia en el sector.
