Viernes, 05 de diciembre de 2025
Volver Salamanca RTV al Día
El 70% de los celíacos en Salamanca sigue sin diagnóstico: la lucha de ACECALE por la visibilidad y el apoyo
X

REPORTAJE

El 70% de los celíacos en Salamanca sigue sin diagnóstico: la lucha de ACECALE por la visibilidad y el apoyo

Actualizado 26/05/2025 20:25

Noelia Rodríguez, dietista de la Asociación de Celíacos de Castilla y León (ACECALE), desgrana la situación actual de la enfermedad celíaca y otras patologías asociadas al gluten en la provincia, los avances logrados y los cruciales retos pendientes para un colectivo que busca normalizar su día a día.

En la provincia de Salamanca, una realidad a menudo invisible afecta a miles de personas. La enfermedad celíaca, la sensibilidad al gluten no celíaca y la alergia a los cereales, aunque cada vez más conocidas, siguen representando un importante desafío tanto diagnóstico como social. Noelia Rodríguez, dietista de la Asociación de Celíacos de Castilla y León (ACECALE), nos ofrece una radiografía detallada de esta situación, subrayando la importancia de la detección temprana y el apoyo integral a los afectados.

Una prevalencia significativa y un alarmante infradiagnóstico

Según los datos de prevalencia actuales, se estima que el conjunto de estas patologías relacionadas con el gluten afecta al 2% de la población. Esto se traduce en que, en la provincia de Salamanca, "pueden verse afectadas de estas patologías cerca de 6.000 personas", explica Rodríguez. Sin embargo, la cifra más preocupante es la del infradiagnóstico: "El problema es que todavía el 70 por ciento de los casos está sin diagnosticar", advierte la dietista. Esta situación se atribuye, en parte, a la similitud de los síntomas con otras afecciones digestivas y a la demora en la realización de las pruebas diagnósticas específicas.

Una de las reivindicaciones clave de ACECALE a Sanidad es la creación de un registro epidemiológico oficial. "Realmente no tenemos un censo real de personas a las que afecta esta patología", comenta Rodríguez, debido a que "hace unos años que las nomenclaturas que se utilizaban eran diferentes, antes se decía intolerantes al gluten, celíacos, sensibles". A pesar de esta falta de censo, se observa un incremento en los diagnósticos, impulsado por un mayor conocimiento general y la identificación de nuevas condiciones como la sensibilidad al gluten no celíaca, una patología "recientemente descubierta" con síntomas similares a la enfermedad celíaca y que mejora con la dieta sin gluten.

Síntomas y diagnóstico: la importancia de la detección precoz

Los síntomas varían considerablemente según la edad. En niños, son comunes los problemas digestivos como diarreas, náuseas, vómitos o estreñimiento. También pueden experimentar "fallo de medro", un estancamiento en los percentiles de crecimiento, irritabilidad, "mucha aversión a probar nuevos alimentos" e incluso "aftas bucales o manchas amarillitas también alrededor de los dientes".

En adultos, los síntomas digestivos pueden o no estar presentes. La atrofia vellositaria, característica de la enfermedad celíaca no tratada, compromete la absorción de nutrientes, pudiendo derivar en "anemias de repetición, falta de hierro, de vitamina B12, osteoporosis, depresión, ansiedad". Además, Rodríguez señala que "afecta mucho al aparato reproductor, donde se producen abortos de repetición o, por ejemplo, en el caso de las mujeres no consiguen quedarse embarazadas".

Ante la sospecha, el mensaje de la experta es claro: "Siempre, ante estos síntomas, acudir al médico de cabecera". El proceso diagnóstico correcto incluye un análisis de anticuerpos específicos, una biopsia intestinal para confirmar la atrofia vellositaria y, fundamentalmente, "corroborar que existe mejoría tras eliminar el gluten de la dieta". Rodríguez insiste en evitar el autodiagnóstico y la eliminación del gluten sin supervisión médica, ya que puede enmascarar y dificultar un diagnóstico certero posterior.

ACECALE en Salamanca: un pilar de apoyo y orientación

La Asociación de Celíacos de Castilla y León (ACECALE) desempeña un papel fundamental en el acompañamiento de los pacientes y sus familias. En Salamanca, atienden todos los miércoles en la Casa de las Asociaciones. "Nosotros siempre ofrecemos las consultas de asesoramiento y orientación personalizadas, tanto a las personas que les acaban de diagnosticar como también a las familias", detalla Rodríguez.

Este apoyo integral abarca desde ayudar a entender la enfermedad y cómo llevar una dieta sin gluten estricta, hasta cómo evitar la contaminación cruzada en la cocina, leer correctamente las etiquetas de los alimentos y manejar situaciones sociales. ACECALE proporciona herramientas prácticas como un "librito con un listado de alimentos sin gluten" y una aplicación móvil que, escaneando el código de barras, "ya te identifica si ese producto es seguro o no". Además, ofrecen apoyo psicológico y emocional, y organizan actividades como los demandados talleres de cocina, donde enseñan a elaborar recetas sin gluten "más saludables, con muchos menos ingredientes, más económicas también".

El desafío de comer fuera: la restauración sin gluten

Uno de los mayores retos para las personas celíacas es comer fuera de casa. "Aunque cada vez hay más restaurantes que ofrecen esos menús sin gluten, muchas veces el riesgo de contacto cruzado sigue siendo una gran preocupación para ellos", afirma la dietista. La falta de formación del personal y de protocolos adecuados en las cocinas puede convertir una salida en una fuente de ansiedad y riesgo.

En una ciudad turística como Salamanca, la situación es mejorable. ACECALE impulsa el proyecto "Restauración sin Gluten", asesorando a establecimientos: "Revisamos con ellos todos los ingredientes que van a formar parte de la carta sin gluten, luego hacemos una revisión de las instalaciones, hacemos una formación para todo el personal y les avalamos con un sello". A pesar de facilitar el proceso, Rodríguez lamenta que "nos encontramos muchas veces con bastante desconocimiento por parte de los profesionales"

En contraste, la situación en los comedores escolares está más controlada. "En los pliegos de condiciones para la licitación de las empresas de comedor, ya hay un punto específico que determina que se tienen que adaptar todos los menús para niños con alergias, intolerancias alimentarias y, en este caso, también con enfermedad celíaca", explica Rodríguez, asegurando que "prácticamente casi todos los comedores escolares ya disponen de esas opciones seguras".

Avances y concienciación: el Día Nacional del Celíaco como altavoz

Las asociaciones de pacientes han sido cruciales para dar visibilidad a la enfermedad celíaca. Las campañas de concienciación y las mejoras en las leyes de etiquetado han supuesto avances significativos. Con motivo del Día Nacional del Celíaco (27 de mayo), ACECALE ha programado diversas actividades.

En Salamanca, el 21 de mayo se celebró una jornada informativa en la Universidad Pontificia con un médico especialista en digestivo, una psicóloga y una nutricionista. Previamente, el 15 de mayo se iluminó la fuente de la Puerta Zamora y el 16 de mayo aparecieron mensajes informativos en los paneles luminosos de la ciudad para "dar difusión de la causa y reforzar también, pues el compromiso institucional con esta enfermedad".

A nivel regional, destaca 'Celichef: un reto entre fogones', un concurso de cocina para alumnos de escuelas de hostelería de Castilla y León. Esta iniciativa, "pionera en nuestra comunidad", busca formar a futuros profesionales concienciados. La semifinal tendrá lugar el 28 de mayo y la final el 4 de junio en la Escuela Internacional de Cocina de Valladolid.

Mirando al futuro: las grandes reivindicaciones del colectivo

A pesar de los progresos, quedan importantes retos. Uno de los principales es la "aplicación efectiva del protocolo de diagnóstico precoz" en el sistema sanitario. Rodríguez advierte que "las largas listas de espera o el no aplicar ese correcto protocolo nos está llevando a que las personas celíacas vengan con otras patologías asociadas".

La enfermedad celíaca es crónica y su único tratamiento es una dieta sin gluten de por vida, lo que supone un considerable sobrecoste económico. "El último informe de precios ha estimado que una persona celíaca gasta alrededor de 1.000 euros más al año que comparándolo con una persona sana", subraya. Por ello, otra reivindicación clave es la inclusión de alimentos específicos sin gluten en las prestaciones del Sistema Nacional de Salud. Finalmente, la lucha continúa por la "adaptación de todas las esferas de la sociedad para lograr la plena inclusión" del colectivo celíaco, un camino donde la información y la empatía son cruciales. Para más información, pueden consultarse recursos como anteriores artículos sobre salud y bienestar.