Juegan un papel absolutamente crucial en la experiencia de los peregrinos
Un evento de estas características, con una afluencia tan extraordinaria de personas, no sería posible sin la colaboración generosa y desinteresada de un nutrido grupo de voluntarios. El prior de los Carmelitas Descalzos de Alba de Tormes, Miguel Ángel González, tuvo palabras de especial y profundo agradecimiento para ellos: "Subrayar enormemente el compromiso, el sacrificio y el buen hacer de los voluntarios de organización en la atención amable a todos los visitantes".
Movidos por su fe y su deseo de servir, son la cara visible de la acogida y juegan un papel absolutamente crucial en la experiencia de los peregrinos. Desde la organización de las filas, la información a los visitantes, la asistencia a personas con movilidad reducida, hasta la simple sonrisa de bienvenida, su labor es ingente y, a menudo, discreta pero siempre esencial. Garantizan que la compleja logística funcione con fluidez y que cada visitante se sienta atendido y acompañado.
La dedicación de estos voluntarios, su paciencia y su amabilidad son un testimonio vivo del espíritu teresiano de servicio y entrega a los demás. Son, en muchos sentidos, el corazón que permite que eventos como este latan con fuerza y dejen una huella positiva en todos los que participan.

La comunidad carmelita y toda Alba de Tormes pueden sentirse orgullosos no solo de la respuesta de los fieles, sino también de la calidad humana y el compromiso de quienes colaboran altruistamente para hacerlo posible.
Es también el caso del cuerpo de voluntarios de Protección Civil 'Mancomunidad Rutas de Alba' y los voluntarios de Cruz Roja. Todos velan por hacer que los peregrinos se sientan bien y seguros antes cualquier problema que pueda surgir.