Natural de Villoruela, no duda en implicarse al máximo en la vida social, festiva y cultural de su localidad y las cercanas de la comarca, siempre con la cámara activa para captar sus momentos
Captar la vida y disfrute de sus vecinos sin grandes postureos, al natural, y ofrecer un apoyo para que estas instantáneas recorran nuestras tierras en forma de crónica o simplemente en un cuidado mensaje en redes sociales.
Este bien puede ser una de las esencias principales de Basilio Sánchez, por cuyas venas corre la sangre de la comunicación y la pasión por los medios, aunque es imposible no darse cuenta de la emoción que asoma por sus ojos cuando le nombras la radio, su gran pasión.
Hoy, a sus 65 años disfruta de una vida relajada en su Villoruela natal, localidad por la que es muy difícil pasear, preguntar y encontrar a alguien que no le conozca. Implicado en la vida social y cultural del pueblo, no pierde la oportunidad de retratar momentos especiales o de celebración, para trasladar a medios como Salamanca al Día o Las Villas al Día, de manera totalmente desinteresada pero cargado de ilusión lo que está pasando.
“Si tuviera que definirme sería como un vecino y a la vez colaborador de las villas” asegura Basi, quién, además de su municipio, no duda en visitar localidades cercanas para igualmente disfrutar de su vida, ambiente o fiesta y aprovechar el momento para capturar la vida de sus calles.
La gran pasión de Basilio ha sido y es la radio, marcando su vida en una trayectoria dilatada a través de los años en su añorada emisora local radio Las Villas, en la que tomaba el pulso a la vida diaria de todos los municipios de la comarca a través de sus micrófonos. Una colaboración a la que se suma su destacada presencia en emisoras como la Cadena Ser.
Desde ahí le viene el gusanillo de la comunicación, algo que hoy esta directamente ligado a la cámara de su móvil, con el que fotografía las procesiones, los bailes, los pregones o las fiestas de los quintos, siempre con su toque personal, algo que le convierte en un especial ‘cronista del pueblo’, afición que disfruta y vive con toda su intensidad.
“Si tuviera que destacar algo de los muchos actos y festejos en los que he estado y he fotografiado es la alegría de la juventud de mi pueblo y como se ponen tan contentos cada vez que me ven…Ellos mismos ya se colocan y posan para la foto, casi no hace falta decirles nada” asegura sonriendo.
Basilio no piensa dejar de lado ese disfrute en el que se ha convertido esta afición tan desinteresada y a la vez apasionante, eso lo tiene claro. “Mientras pueda ahí estaré y ahí me tendrán” asegura, mientras que, al preguntarle por como le gustaría que le considere la gente, afirma rotundo que “como una persona normal y corriente”.