Una entidad privada creada para comprar los activos tóxicos de las entidades financieras para que sanearan sus cuentas a raíz de la crisis de 2008 y pudieran ser rescatadas; ahora es pública y también se usa para promover el alquiler asequible y la construcción de vivienda pública
Sareb, la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, nació en 2012 con el objetivo de rescartar los activos inmobiliarios tóxicos que tras las crisis económica de 2008 habían aculado las entidades financieras sucesoras de las 24 cajas de ahorros que tuvieron que ser rescatadas. Estos activos incluían créditos impagados, viviendas sin construir o promociones inmobiliarias a medio terminar que eran un lastre para las entidades financieras.
La creación de la Sareb fue una de las condiciones de la Unión Europea para que España recibiera el rescate financiero de hasta 100.000 millones de euros que se destinaron al rescate bancario.
De esta manera, se estableció como una herramienta para sanear los balances de los bancos, comprando sus activos tóxicos a un precio inferior al que los adquirieron; así, los bancos vendían esos activos para reducir sus pérdidas y sanear sus cuentas, además de fomentar el crédito a empresas y familias. Una transacción beneficiosa para los bancos con los que Sareb consiguió inmuebles.
A lo largo de los años, ha acumulado activos inmobiliarios como pisos, solares, promociones de viviendas en construcción y otros bienes, que anteriormente estaban en manos de bancos en dificultades. Su papel ha sido crucial en la reestructuración del sistema financiero.
Debido a su función principal, a la Sareb se la conoce como el ‘banco malo’. Sin embargo, no realiza actividades propias de la banca, ni depósitos ni ofrece productos financieros o créditos; su negocio se basa en comprar y gestionar esos activos inmobiliarios de los bancos, muchos de los cuales no tienen valor suficiente en el mercado como para saldar las deudas emitidas por las entidades financieras.
Las viviendas que vende la Sareb, cuyos compradores mayoritariamente son personas físicas -según la entidad, un 90%- suelen tener un precio inferior que el de la media del mercado inmobiliario, ya que el objetivo es liquidar estos activos, además muchos de ellos necesitan reformas o se encuentran en áreas con menos demanda. Sareb también dispone de una extensa cartera de suelos, que ha puesto a disposición de administraciones públicas en condiciones muy ventajosas.
Aunque en un primer momento se constituyó como empresa privada, el Gobierno modificó la ley en 2022 para convertirla en pública. Con la actual crisis de acceso a la vivienda, se la ha visto como un activo clave para promover el alquiler asequible y accesible.
En 2023 se lanzó el Proyecto Viena, una iniciativa incorporada al plan de vivienda en alquiler asequible aprobado por el Gobierno, cuyo objetivo es construir viviendas para dedicarlas a alquiler asequible mediante un esquema de colaboración público-privada. En virtud del proyecto se ofertarían más de 130 suelos de Sareb a promotores para que, con unos derechos de superficie a largo plazo, construyan más de 10.000 viviendas.
Sareb arrancó en octubre de 2024 el primer paso de este proyecto: la licitación pública de 50 suelos en 39 municipios, entre ellos, Salamanca, para contruir alrededor de 3.700 viviendas en régimen de alquiler asequible; las parcelas ofertadas se agruparon en siete lotes, cada uno de los cuales incluían suelos ubicados en distintas comunidades. En la capital salmantina salió a licitación un solar en la calle Juan de Álava con capacidad para construir una treintena de viviendas.
Su licitación pública ha estado abierta hasta el 20 de enero de 2025 y ha finalizado sin éxito; no ha recibido ofertas ni de promotores ni de inversores, por lo que la Sareb ha abierto un periodo de análisis y diálogo con el sector para valorar las posibles causas y realizar cambios para relanzar el proyecto.
La actividad de la Sareb finalizará en 2027, fecha límite que la sociedad tiene para dar salida a todos sus activos, aunque no se sabe si podrá ser capaz de cancelar por completo su deuda para ese año.
La Sareb cuenta con un gran número de inmuebles a lo largo de la geografía española, según sus datos, son 37.618 viviendas, 25.312 anejos, 21.166 obras en curso, 26.962 suelos y 7.533 inmuebles terciarios. Entre estos inmuebles se encuentran los ubicados en Salamanca capital y otros municipios de la provincia; pinchando en este enlace, se puede ver el listado de localidades dónde el 'banco malo' tiene inmuebles y su tipo.