El Ayuntamiento sustituye las losas de pizarra, especialmente peligrosas en días de lluvia, en la calle Azafranal
Salamanca da un paso más en la mejora de la accesibilidad y la seguridad de sus calles, en concreto para evitar caídas de los viandantes. El Ayuntamiento ha puesto en marcha un plan para sustituir las antiguas losas de pizarra en varias zonas del casco histórico, conocidas por su superficie deslizante y especialmente peligrosa en días de lluvia.
La intervención ha comenzado en la calle Azafranal, un tramo concurrido entre las plazas de Santa Eulalia y Liceo. En este punto, se está instalando un nuevo pavimento de hormigón drenante y antideslizante. Este material, además de prevenir resbalones, permite una mejor gestión del agua de lluvia, evitando encharcamientos. Las nuevas losas se asientan sobre una base de gravilla silícea, y las juntas se sellan con arena para garantizar una superficie uniforme y segura.
El compromiso del Ayuntamiento con la accesibilidad continúa. Este año se llevarán a cabo obras de urbanización en otras zonas de la ciudad, como la calle Gran Capitán, la plaza de San Román, varias calles del barrio La Vega, las calles Gorrión, Gaviotas, Garza y Alondra del barrio San Bernardo, y la instalación de un ascensor junto a las 'escaleras de la Riojana' en la Gran Vía.