Orson Welles y su huella en Castilla y León: un viaje cinematográfico con parada en Salamanca

Orson Welles, reconocido director, actor, guionista y productor, dejó una profunda huella en el cine español. Su amor por España, que comenzó a florecer tras su visita a Sevilla a los 17 años, lo llevó a rodar seis largometrajes en el país. Entre sus lugares favoritos, Ávila ocupaba un lugar especial, donde expresó su deseo de vivir. En sus propias palabras, describió a Ávila como un "lugar extraño y trágico" que le evocaba sentimientos profundos.

La fascinación de Welles por España no solo se limitó a su cultura y su historia, sino que también se tradujo en su obra cinematográfica. Tras su fallecimiento, sus cenizas fueron depositadas en Ronda, lo que simboliza su conexión eterna con el país. En su carrera, Welles filmó en diversas localizaciones de Castilla y León, incluyendo Ávila, Soria, Segovia, Salamanca y Valladolid.

Producciones destacadas en Castilla y León

Welles consideraba 'Campanadas a medianoche' (1965) como su producción más ambiciosa, filmada en Ávila y Soria. Para financiarla, participó como actor en 'La Isla del Tesoro' (1972), que compartía localizaciones y equipo. Además, su legado cinematográfico incluye otras obras filmadas en la región, como:

• Mr. Arkadin (1955): Un thriller que explora la amnesia y el misterio a través de la vida de un millonario.
• Campanadas a medianoche (1965): Una adaptación de varias obras de Shakespeare ambientada en la Guerra de los Cien Años.
• Una historia inmortal (1968): Una narración sobre obsesiones y leyendas en el Macao del siglo XIX.
• Don Quijote de Orson Welles (1992): Una obra que refleja la visión de Welles sobre España a través de las peripecias de Don Quijote y Sancho.

Salamanca: El corazón de 'Don Quijote'

La película 'Don Quijote de Orson Welles' (1992) es un testimonio de su amor por Salamanca. A partir de las filmaciones dispersas por el mundo, su amigo Jesús Franco compiló el material y lo montó siguiendo las indicaciones de Welles. Este documental ofrece una visión única de España en clave cervantina.

En los 130.000 metros de película que se conservan de este proyecto inacabado, Salamanca brilla con luz propia. Entre los planos más destacados se encuentra la Catedral Nueva, cuyas torres dominan la ciudad, junto a la impresionante vista de la Clerecía y la terraza del Convento de San Esteban. Estas imágenes no solo capturan la belleza arquitectónica de la ciudad, sino que también reflejan la rica historia y cultura que Welles tanto admiraba.

Así, su legado en Castilla y León, especialmente a través de 'Don Quijote', continúa inspirando a cineastas y amantes del arte. La ruta cinematográfica que recorre sus películas en la región es un homenaje a su visión y a la riqueza patrimonial de España.

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