Explica que “partimos de estudios que determinan que disponemos de una calidad de aire de las mejores que hay en Europa”
Ante la normativa para reducir la contaminación en las ciudades, Salamanca ha apostado por un enfoque único hacia las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). En lugar de imponer restricciones inmediatas, el Ayuntamiento ha optado por una moratoria de seis meses, permitiendo a los ciudadanos adaptarse a los cambios sin prisas.
Como explica a SALAMANCA AL DÍA Ángel Molina, concejal de Protección Ciudadana, Tráfico y Transportes, "todo viene por una imperativo legal del Gobierno central que obliga a todas las ayuntamientos de más de 50.000 habitantes a tener implantada en la ZBE, pero partimos de estudios que determinan que disponemos de una calidad de aire muy buena, incluso de las mejores que hay en Europa". Por ello, el equipo de gobierno de la ciudad ha decidido adoptar una ordenanza lo menos restrictiva posible.
Así, hasta el año 2029, no habrá restricciones por etiqueta de vehículo para acceder a las zonas de bajas emisiones. "Lo primero que tenemos que tener claro es que por Zonas de Bajas Emisiones no va a haber ninguna restricción hasta el 2029", recalca el edil. Sin embargo, las zonas peatonales, que ya tenían restricciones, seguirán manteniéndolas.
Un cambio significativo es la introducción de una plataforma web para gestionar el acceso a estas zonas. "A partir de ahora, para poder acceder, se ha implementado esta plataforma web", explica Molina. Esta herramienta busca facilitar el acceso a las zonas peatonales, reemplazando el antiguo sistema de llamadas telefónicas y correos electrónicos.
La plataforma ya está operativa para todos los colectivos, como personas con movilidad reducida, taxis, comercios, parking públicos, hoteles, apartamentos turísticos, vehículos de carga y descarga, colegios... "y también para los particulares con garajes, residentes, los que tienen una segunda vivienda...", añade el concejal. En este sentido, la moratoria de seis meses, hasta el 1 de julio de 2025, permitirá a los ciudadanos familiarizarse con esta nueva herramienta sin presiones.
"Es una plataforma como cualquier otra, es muy sencillo. Todos los cambios generan una pequeña incertidumbre pero terminan normalizándose, y es asumido muy bien por toda la gente. Al final solo es una modificación en la forma de acceder a estas zonas peatonales", matiza.
En este sentido, el responsable municipal de estos cambios ponía un ejemplo: "una clienta de un centro médico, que no pueda acudir andando hasta la clínica, irá con el vehículo hasta la puerta y la propia clínica tendrá ese usuario y contraseña de la plataforma para autorizarlo". En su opinión, "si hasta ahora no ha habido un problema para acceder a zonas peatonales, a partir de ahora el Ayuntamiento no lo va a generar".
Finalmente, ante las críticas de los colectivos ecologistas por la falta de medidas más estrictas, Ángel Molina defiende la postura del Ayuntamiento: "Nosotros tenemos que gobernar para toda la ciudad y nos hemos basado, como antes señalaba, en que nuestra ciudad dispone de una calidad del aire muy buena, de las mejores en Europa y esa es la mejor referencia. No tenemos que hacer unas políticas muy restrictivas".