San Sebastián libra la lluvia en los debuts del piquete de la Guardia Civil y la Corte de Honor del Carnaval
Al paso por la Plaza Mayor, la Coral Dámaso Ledesma y la Banda Municipal de Música interpretaron un año más el Himno de Ciudad Rodrigo
Con un ojo pendiente del cielo debido a la inestabilidad meteorológica (que finalmente no afectó a los actos), Ciudad Rodrigo conmemoró de forma solemne durante la mañana del lunes la festividad de su patrón San Sebastián, a quién se ha venido honrando desde el pasado domingo 12, cuando fue subido hasta la Catedral de Santa María, que acogió a partir de esa misma jornada la habitual novena.
La Seo mirobrigense fue el primer gran punto de referencia en la mañana del lunes, con la concurrida eucaristía presidida por el Obispo José Luis Retana, quién estuvo acompañado por unos cuantos sacerdotes más, entre ellos el presidente del Cabildo Catedralicio, Ángel Martín Carballo; y el Vicario General de la Diócesis Civitatense, José María Rodríguez-Veleiro. Esta celebración litúrgica fue animada por la Coral Dámaso Ledesma.
En una posición destacada se situaron los 4 mayordomos que ha tenido San Sebastián este año, Antonio Sánchez-Vasconcellos Pahissa, Leopoldo Gómez Vicente, Jaime Francisco Sanmartín Sierra y Jaime Risueño Núñez, quienes tuvieron al lado a la Corporación Municipal presidida por Marcos Iglesias casi al completo (sólo faltó Juan Tomás Muñoz, llevando capa la práctica totalidad de los presentes), el presidente de la Diputación Javier Iglesias, el diputado comarcal Gerardo Marcos, y el Jefe de la Policía Local Narciso Caridad.
Como invitados especiales, se contó con numerosos mandos militares y de la Guardia Civil: el Teniente General de la Guardia Civil (ya retirado) Juan Luis Pérez Martín; el nuevo Jefe del Regimiento de Especialidades de Ingenieros Nº11, el Teniente Coronel Óscar Javier Nogués Santaló (acompañado por el Suboficial Mayor Rogelio Barroso Martín); el subdelegado de Defensa en Salamanca, el Coronel Emilio García Herrera; el presidente de la Hermandad de Veteranos de las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil, el Coronel José Carrasco Menéndez; el comandante Jefe interino de la Comandancia de la Guardia Civil de Salamanca, Isaías Galache Herrán; el Capitán de la Compañía de Ciudad Rodrigo de la Benemérita, Pablo Javier Gatell Ruiz de Gordejuela; y el jefe accidental del Puesto de Ciudad Rodrigo, el Cabo 1º Miguel Ángel Zamarreño Álvarez.
La Guardia Civil contó con representación adicional en la procesión, ya que en la mañana del lunes hizo su debut escoltando al patrón de Miróbriga el piquete de la Benemérita que propuso incorporar el Capitán de la Compañía de Ciudad Rodrigo (hubo cuatro agentes rodeando la imagen durante el recorrido). Junto a este piquete, también debutó en la celebración de San Sebastián la Corte de Honor del Carnaval, que en este 2025 está integrada por Vega Gómez Castaño como Reina; y Alicia Alonso Hernández y Lorena Pérez Pinto como Damas.
Todas las autoridades mencionadas (en lo que respecta a la Corporación, escoltada por los maceros) ocuparon lugares de privilegio en la procesión, que se inició con la salida de San Sebastián por el Pórtico del Perdón (portada entre otros por dos bomberos de la Diputación) mientras la Banda Municipal de Música interpretaba el Himno de España. A partir de ahí, la comitiva, encabezada por tres monaguillos, los redoblantes, la Corte de Honor, el tamborilero Andrés García Del Arco y el pendón de la Cofradía, puso rumbo en primer lugar a la Plaza Mayor, donde fue recibida por el Reloj Suelto.
Allí, se hizo una breve parada, para disfrutar de la interpretación del Himno de Ciudad Rodrigo por parte de la Coral Dámaso Ledesma y de la Banda Municipal de Música, que fue cerrando la numerosa comitiva, que tomó la calle Madrid, desarrollándose junto a la Puerta del Conde el clásico lanzamiento de anises entre público y participantes, para sorpresa de algunos de ellos, como las autoridades militares y de la Guardia Civil.
Poco a poco, se fue avanzando por el Registro, la Glorieta del Árbol Gordo, la calle Lorenza Iglesias y la calle San Cristóbal para alcanzar la Parroquia de San Cristóbal, a cuyas puertas esperaba el capellán de la Cofradía, Rafael Caño. Tras la interpretación de una pieza por parte del tamborilero, del Himno de España por parte de la Banda de Música, y del lanzamiento de varias vivas, se procedió a introducir la imagen, donde hubo una última oración dirigida por el Obispo. A continuación, todos aquellos que quisieron pudieron venerar la reliquia de San Sebastián, con una reverencia con la cabeza.
A partir de ahí, fue turno para regresar al centro histórico, a un buen ritmo, con una primera parada para despedir a los miembros del Cabildo Catedralicio (Ángel Martín Carballo, Tomás Muñoz Porras y Vidal Rodríguez Encinas), a la que siguió otra para hacer lo propio con el Obispo a las puertas del Palacio Episcopal. La última parada fue en la Plaza Mayor (donde se entró por la calle Colada), donde los miembros de la Cofradía y la Banda de Música se despidieron de la Corporación y las autoridades militares.
Tras la marcha de la Banda Municipal de Música tocando el Forastero, los mayordomos y el resto de miembros de la Cofradía abandonaron la Plaza por la calle San Juan, en dirección al Campo de Pozo, donde se sitúa el domicilio de uno de los mayordomos, donde se produjo la despedida definitiva de la mañana, aunque posteriormente todos los presentes se dirigieron a tomar un aperitivo al Palacio de Montarco.